Sanidad contrata todas las camas ofertadas por los hospitales privados, que no cubren el 100% de las plazas licitadas

Sede de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias en Las Palmas de Gran Canaria.

Iván Suárez

Las Palmas de Gran Canaria —

La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias ha resuelto el concurso para la prestación de los servicios de hospitalización de media y larga estancia a pacientes derivados del Servicio Canario de Salud (SCS) con una adjudicación que satisface por completo las expectativas de las clínicas privadas que han concurrido al procedimiento, al concederles el 100% de las camas que estas ofertaron (890), pero que, aun así, no ha logrado cubrir las necesidades de concertación previstas en las bases publicadas en marzo, al quedar desierto el 23% de las plazas licitadas (1.157).

La adjudicación de estos conciertos sanitarios de hospitalización, que rompen con los convenios que arrastra la administración autonómica desde la época franquista al margen de la ley, asciende a 166 millones de euros para los próximos cuatro ejercicios, a razón de 41,5 millones al año. Es decir, un 75% del presupuesto base de licitación, que ascendía a 220 millones con la posibilidad de incluir modificaciones hasta un máximo de 242.

La orden de adjudicación de los dos lotes está firmada por el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Narvay Quintero, en sustitución del titular de Sanidad, José Manuel Baltar, que se ha abstenido en todo el procedimiento por imperativo legal, ya que antes de acceder al cargo ocupaba el puesto de gerente en una de las empresas licitadoras, el grupo hospitalario San Roque. Su procedencia no le impidió, sin embargo, firmar el pasado mes de abril la orden de homologación que daba a las clínicas privadas un año más de plazo para acreditar las condiciones que deben cumplir desde el año 2006 y que son indispensables para poder recibir pacientes de la sanidad pública.

La mayor parte de las plazas declaradas desiertas en el concurso corresponde a Tenerife. De las 472 camas licitadas en esta isla en el lote 1 ( derivación de pacientes con enfermedades de nueva aparición, reagudización o complicación de procesos de base), las clínicas tan solo han ofertado 284, un 60% del total. El principal grupo hospitalario privado de Canarias, Hospiten, propiedad del empresario Pedro Luis Cobiella, se lleva una de cada tres plazas concertadas en Tenerife a través de dos centros, Belleuve (un 26% de las camas) y Hospiten Sur (un 7%). En total, 19 millones de euros para los próximos cuatro años, uno menos que la Clínica Quirón, que acapara el 35% de las camas. El reparto lo completan San Juan de Dios (14 millones de euros, un 25%) y Hospital Parque (4 millones y un 7%).

En la isla de Gran Canaria sí se cubre la práctica totalidad de las camas licitadas en el lote 1, 264 de un total de 268. De los 59 millones adjudicados, la Clínica Perpetuo Socorro se lleva cerca de 18, el 30% del total; Vithas Santa Catalina, 15 millones (un 26%); la clínica La Paloma, algo menos de 15 millones (25), y Hospitales San Roque, el grupo del que procede el actual consejero de Sanidad, 11 millones de euros por sus 50 plazas (un 19%).

En el lote 2, destinado a la derivación de pacientes en proceso de recuperación o rehabilitación que ya han superado la primera fase de la enfermedad y requieren cuidados de hospitalización, se han adjudicado 342 de las 417 plazas presupuestadas. Todas ellas en la isla de Gran Canaria, ya que ninguna empresa se ha presentado para cubrir las 27 camas demandadas en Tenerife.

El grupo ICOT, a través del Hospital Ciudad de Telde, es el gran beneficiado en el concurso de larga estancia, al acaparar más de la mitad de las plazas concedidas, 179, por un importe total de 26 millones de euros para los próximos cuatro años, una cifra que eleva de forma considerable lo que hasta ahora recibía del Servicio Canario de Salud sin estar homologado, alrededor de 5 millones anuales. En los juzgados de la Ciudad de los Faycanes aún permanece abierto un proceso judicial contra este centro tras la denuncia interpuesta por una empresa competidora por supuestas irregularidades en el concierto hasta ahora vigente, que data de 1983, cuando las competencias aún no habían sido transferidas a la comunidad autónoma.

A este lote también concurrieron la Clínica Cajal, a la que se le conceden 114 camas, 16,5 millones de euros, y la Clínica San José, que recibirá 7 millones en cuatro años.

La adjudicación de los conciertos de media y larga estancia pone fin a un proceso iniciado en la primavera de 2016. El entonces consejero de Sanidad del Gobierno canario, Jesús Morera, constituyó entonces una unidad funcional de gestión de los conciertos para revisar los convenios que se mantenían en vigor, a través de prórrogas automáticas y en contra de lo estipulado en la Ley de Contratos del Sector Público, desde la época preconstitucional. Fue el pasado mes de marzo, ya con Baltar al frente de la Consejería, cuando se convocó el concurso al que han concurrido un total de once grupos hospitalarios privados.

Además del mencionado procedimiento que se sustancia en un juzgado de instrucción de Telde, los conciertos con la sanidad privada en Canarias también están siendo objeto de investigación en el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 4 de Las Palmas de Gran Canaria, que ha abierto diligencias tras el recurso interpuesto por Podemos, que acusa al Gobierno de Canarias de inactividad y de incumplir sus obligaciones en este ámbito.

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