¿Por qué no había puertas para impedir el acceso a la piscina natural en la que murieron cuatro turistas en Tenerife?

Este domingo varias olas de gran tamaño barrieron la piscina natural de Isla Cangrejo, en la costa oeste de Tenerife, llevándose consigo a varias personas hacia el mar y las rocas. Cuatro de ellas murieron (tres en el mar y la cuarta, ya en el hospital) y una quinta se encuentra desaparecida. Todas las víctimas eras turistas que, para acceder a la zona, se habían saltado un precinto colocado por la Policía Local y habían ignorado los carteles en varios idiomas que advierten del peligro de esa franja costera, sobre todo cuando hay oleaje, como era el caso. Es más, desde el viernes estaba activada una prealerta de la Dirección General de Seguridad del Gobierno de Canarias por fenómenos costeros, ya que se esperaban olas de unos cuatro metros como mínimo.

Este martes, en pleno luto oficial por lo ocurrido, el alcalde de Santiago del Teide ha explicado en una entrevista en Radio Marca Tenerife por qué en el acceso principal a la zona solo había una valla provisional en lugar de una puerta que impidiera a los bañistas entrar en la piscina natural.

Según ha relatado Emilio Navarro, en el pasado sí hubo puertas, pero tras una denuncia de un tercero a través de Costas, hubo que retirarlas. “Anteriormente, nosotros teníamos puertas. Las cerrábamos cuando se daban las condiciones de fenómenos costeros adversos, como en este fin de semana. A través de la denuncia de un tercero, que llegaba al departamento de Costas, nos decían que no podíamos cerrar los accesos al mar. Tuvimos que retirar las puertas y ahora utilizamos el sistema de vallado”, ha expuesto.

El alcalde ha afeado también la actitud de estas personas que no respetan las vallas ni tienen en cuenta las advertencias. “A nadie se le ocurre en ningún lugar del mundo saltarse un precinto. El problema lo estamos encontrando más con los turistas que con los residentes. La gente hace caso omiso. Desgraciadamente, no hemos podido salvar la vida de estas personas”, ha explicado. Además, ha relatado que cuando aún estaban “sacando a un fallecido en camilla” ya les estaban preguntando “cuándo podían volver a entrar a la piscina”.

Navarro ha añadido que, aunque se ponen multas, el objetivo es salvar vidas. “La multa no es la solución final. Las hacemos y levantamos las actas, pero la cuestión es salvar vidas. El precinto tiene que ser suficiente para que nadie acceda a estos espacios”, ha concluído.

Este martes continúa la búsqueda de una quinta persona arrastrada por las olas en la piscina. El fuerte oleaje también ha costado la vida en las últimas horas a un pescador en Lanzarote que también fue arrastrado por el mar.