No había medios de comunicación invitados porque ATI quería estar a gustito, sin disimulos. Pero un alma caritativa grabó las intervenciones y se las pasó a Radio San Borondón, del Centro de la Cultura Popular Canaria, y ellos, al mundo mundial. Hermoso, en su línea habitual, hizo de nuevo un poco de historia acerca de los inicios del partido, mientras que Ana Oramas se permitió alguna soflama nacionalista, sin dejar de referirse a lo bueno y honesto que es el homenajeado, que en su etapa de presidente de la comisión de Hacienda del Parlamento, hacía un receso para que la alcaldesa de La Laguna se mandara su bocadillo de tortilla. A algunos de los presentes llamó la atención lo cutre del acto, los cubiertos de plástico, la escasa luz y especialmente los aplausos finales enlatados, como si no hubiera suficiente pasión en el público y hubiera que insuflarla.