Entre los testigos llamados a declarar este viernes por la magistrada Margarita Varona se encuentra el director general de Anfi Resorts, Luis Martínez San Andrés, que en febrero de 2007 declaró a la Policía, en el marco de la Operación Góndola, que al menos durante los años 2006 y 2007, diferentes personalidades influyentes del ámbito político y empresarial se hospedaron en complejos turísticos de la compañía sin abonar “el importe de su estancia (...), pero sí, como regla general, los gastos extras”. En su declaración, Martínez San Andrés dijo que las reservas para esas personalidades sólo podían proceder, una vez fallecido Björn Lyng, de Manuel Fernández (imputado en el caso del salmón) o Santiago Santana Cazorla (imputado en Góndola). Las reservas para las vacaciones de Soria en apartamentos de lujo del complejo Gran Anfi se bloqueaban desde enero, extremo que conoce otra testigo llamada a declarar este viernes, María Dolores Hidalgo Zerpa, jefa de reservas y conocedora del trato de favor que se dispensaba a Soria.