La portada de mañana
Acceder
Puigdemont estira la cuerda pero no rompe con Sánchez
El impacto del cambio de régimen en Siria respaldado por EEUU, Israel y Turquía
OPINIÓN | 'Pesimismo y capitalismo', por Enric González

Un viaje al corazón de Los Oscos, la comarca mágica del occidente asturiano

Paisajes verdes de Los Oscos. Los prados verdes se alternan con las manchas de bosque y los pueblos tradicionales. Viajar Ahora

Viajar Ahora

Agua, tierra, fuego y aire. Los cuatro elementos de los antiguos se encuentran incrustados en el ser de esta comarca que forma la frontera entre las comunidades autónomas de Asturias y Galicia. El agua y el aire fueron moldeando poco a poco la tierra para crear un paisaje de montañas redondeadas y profundos valles siempre verdes. Con la piedra los hombres y mujeres que viven aquí desde hace miles de años construyeron sus pueblos en las atalayas para ver desde las alturas los caminos y los prados. El agua también sirvió para mover los ingenios que ayudaron a sacaron el metal del interior de la piedra y aquí entra en juego el fuego: poder creador que, entre otros útiles y herramientas, forjó uno de los cuchillos más demandados de las tierras de España. Esta combinación de elementos primordiales fraguó la Comarca de Los Oscos. Un auténtico paraíso natural que guarda, también, un patrimonio cultural, arqueológico y etnográfico de primera magnitud. Un lugar que fue pionero a la hora de aprovechar la riqueza del mundo rural para el turismo

Los Oscos son una comarca que se extiende junto a la frontera asturiana con Galicia desde la Ría de Ribadeo hasta las alturas, aquí chatas y medianas, de las montañas. Está integrada por los municipios de: San Martín de Oscos, San Tirso de Abres, Santa Eulalia de Oscos, Taramundi, Vegadeo, Villanueva de Oscos y Castropol y apenas cuenta con unos 12.000 vecinos que viven en pequeños núcleos de población o aldeas diseminadas. Una comarca formada por dos vecindarios bien delimitados: al norte, desde las orillas del Cantábrico, la forma el valle excavado por el Eo y sus afluentes y, al Sur, una especie de meseta elevada que alcanza los 1.200 metros de altitud en su punto culminante (Sierra de la Bobia).

Vegadeo , justo dónde el río se encuentra con la Ría, es la puerta de entrada para los que llegan desde la costa. La carretera AS-21 se interna en el corazón de la comarca tocando alguno de los puntos más importantes. La ruta se sumerge en una sucesión de bosque y prados verdes e entre los que emergen pequeños pueblos de piedra, pizarra y madera. La primera parada obligada de la ruta es Taramundi, un ejemplo paradigmático de lo que ha sido la comarca a lo largo de los últimos treinta siglos. Las piedras más antiguas de Os Castros (Calle Solleiro, 6A) fueron colocadas hace unos 2.800 años y datan de la Edad del Bronce. Pero en esta antigua ciudadela fortificada, de la que se pueden ver las casas, muros y calles, estuvo habitada hasta época romana.

El pueblecito es encantador: casas de piedra con techos de pizarra, viejos hórreos (graneros sobre pilares para evitar la entrada de ratones) y una curiosa colección de molinos de agua restaurados que forman el más que recomendable Museo de los Molinos de Manzonovo (Lugar de Manzonovo, sn; Tel: (+34) 985 646 817; E-mail: info@manzonovo.es) en el que se hace un recorrido muy didáctico y divertido sobre la cultura del agua en la zona. A poco más de cuatro kilómetros de Taramundi se localiza el Conjunto Etnográfico de Teixois (Lugar de Os Texois, sn; Tel: (+34) 696 440 640) una impresionante aldea recuperada con hórreos, casas tradicionales, una herrería y, también, una buena colección de molinos de agua que se remontan al siglo XVIII. Otro punto fuerte de Taramundi es su afamada cuchillería, de las mejores de España. El Museo de Cuchillería (Lugar de Pardiñas, sn; Tel: (+34) 985 646 810; E-mail: info@navallasdetaramundi.com ) explica muy bien el proceso de creación de los famosos filos de Los Oscos y en varias tiendas del pueblo pueden comprarse muy buenos cuchillos a precios bajísimos.

Los otros dos pueblos de importancia de la comarca, alturas arriba, son San Martín de Oscos y Santa Eulalia de Oscos. A pocos kilómetros del primero se encuentra el Palacio de Mon (Lugar de Mon, sn; Tel: (+34) 697 279 690 y (+34) 985 626 000; E-mail: turismo@sanmartindeoscos.es ) una imponente casona solariega de estilo barroco construida en el siglo XVI y, en Santa Eulalia, hay que detenerse a ver la Casa del Marqués de Sargadelos (Calle da Constitución; Tel: (+34) 676 814 094) antigua casona del siglo XVIII restaurada y dedicada a la recuperación de oficios artesanales y tradicionales. Otro punto de referencia patrimonial es el Monasterio de Santa María en Villanueva de Oscos, que hunde sus raíces más antiguas en el remoto siglo XII. Hoy sólo se puede ver la antigua iglesia que, pese a las reformas, conserva grandes zonas románicas.

Minas, sendeeros y naturaleza .- Más allá de las huellas que los hombres y mujeres dejaron en la comarca a lo largo de los milenios, el otro plato fuerte de la comarca es su naturaleza. La comarca está cuajada de senderos que recorren los diversos parajes, poblaciones y diseminados descubriendo las bellezas naturales y etnográficas de la comarca. Algunos senderos son cortos y sencillos aunque espectaculares. Uno de los más accesibles, y que demanda apenas un par de horas, es el que comunica el pueblo de Santa Eulalia con la Cascada de la Seimeira, una espectacular cascada de 30 metros de caída enclaustrada en un imponente bosque de tejos centenarios. Esta ruta, que recibe el evocador nombre de ‘Senda del Desterrado’ da la posibilidad de llegar hasta la aldea de Bosqueimado, una de las tantas pequeñas aldeas de la zona. También desde Santa Eulalia parten también varios senderos que comunican el pueblo con antiguas explotaciones mineras de As Talladas.

Rutas desde Santa Eulalia de Oscos

Rutas desde San Martín de Oscos

Rutas desde Villanueva de Oscos

La Naturaleza de esta parte del Principado asturiano es exuberante. Los bosques atlánticos, en los que prosperan grandes especies arbóreas como el roble, el tojo, el castaño o el abedul, se intercala con grandes porciones de prados verdes donde pastan las vacas, uno de los sustentos de la economía local durante siglos. Pese a la humanización del paisaje, las manchas de bosque aún son de importancia y dan cobijo a una importante fauna en la que destaca el jabalí, el zorro, el corzo, la nutria y una variada presencia de aves como gavilanes, águilas ratoneras, mirlos o petirrojos. El rey del lugar es el lobo, pero rara vez se deja ver. En Santa Eulalia de Oscos hay un interesante Centro de Interpretación (Tel: (+34) 985 626 032) en el que se dan las claves ecológicas y etnográficas de la zona y desde el que parte un sencillo sendero autoguiado.

Los Oscos, también en la costa .- Aunque el fuerte de la comarca se encuentra montaña arriba, también hay una porción de Los Oscos que mira al mar y que tiene el encanto de los pueblos marineros de la costa de Asturias. La Ría de Ribadeo se ensancha formando la primera de las grandes ‘invasiones acuáticas’ que anticipan lo que el viajero se va a encontrar en tierras gallegas. La orilla oriental de esta pequeña cuña de agua de mar pertenece a Asturias y la occidental a Galicia. Vegadeo se enclavó en un punto estratégico justo en la desembocadura de los ríos Eo y Suarón. Paso obligado en la ruta costera hacia Galicia y parada obligada del Camino de Santiago de la Costa. Los puentes y las casonas ilustres son sus principales atractivos. Entre el patrimonio de la pequeña villa destacan laCasa Palacio de Vixande y el Castillo del Pividal, que domina el curso bajo del Eo.

Otro lugar que bien merece una visita es el pequeño pueblo pesquero deCastropol, que aparte de edificios notables como el Palacio de los Marqueses de Santa Cruz (Calle Marqués de Sta. Cruz, 8), una bonita construcción barroca del siglo XVIII, tiene imponentes vistas sobre la ría y un bonito paseo marítimo. En Figueras hay un pequeño puerto de pescadores y hasta una playa de arena rubia, que queda justo en frente del Fuerte de San Damián Fuerte de San Damián (Acceso desde Ribadeo), que se encuentra ya en tierras de la vecina Galicia. Desde aquí, la Playa de Las Catedrales, en la provincia de Lugo, está apenas a un paso.

COMER EN LOS OSCOS

Casa Paulino Casa Paulino (Avda de Galicia –Taramundi-, Tel: (+34) 985 646 736; E-mail: reservas@casapaulinotaramundi.com ) Cocina local buena y abundante. Posibilidad de comer de menú. Recomendables las carnes locales y los platos de cuchara (caldo gallego, fabada, etc). Excelente relación calidad precio.

Restaurante Oscos (Plaza alcalde Mayín, 5 –Villanueva de Oscos-; Tel: (+34) 672 494 977) Especialidades regionales y cocina española en general. Cachopos de impresión y muy buenos platos de cuchara. Y la atención de diez. Más que recomendable.

Sidrería La Vereda Sidrería La Vereda (Calle La Rua, sn -Santa Eulalia de Oscos-; Tel: (+34) 672 494 977) Chiquito pero más que recomendable. Selección de platos tradicionales y una buena carta de rápidos pero de calidad. Hamburguesas caseras de infarto. Lo que más nos gustó, las croquetas caseras y el cachopo de impresión. Carnes a la brasa de muy buena calidad.

Fotos bajo Licencia CC: Chiquiritábiri; Víctor Fernández Salinas; Viajar Ahora; José Antonio Gil Martínez

Etiquetas
stats