Unas 250 personas se concentran en Cuenca para exigir el regreso del tren convencional

Las Noticias de Cuenca

Miguel Á. Ramón —

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Al grito de “Queremos un tren que pare en las comarcas” y “Cuenca quiere tren”, en torno a 250 personas, según estimaciones del Cuerpo Nacional de Policía, han respondido a la llamada de la Coordinadora Estatal por el Tren Público, Social y Sostenible y se han concentrado este domingo por la mañana en la plaza de España para defender el tren convencional y exigir la reapertura de la línea Aranjuez-Cuenca-Utiel.

Una concentración a la que se han sumado desde la Agrupación Pueblos con el Tren hasta partidos políticos, como Cuenca en Marcha! y Partido Popular, entre otros, pasando por asociaciones ecologistas y de consumidores, así como ciudadanos particulares. Todos unidos en torno a la idea de que aún es posible que el tren regrese a la línea Aranjuez-Cuenca-Utiel.

Y, de hecho, así lo ha puesto de manifiesto el portavoz de la coordinadora convocante, José Luis Ordóñez, quien ha insistido en asegurar que la reapertura de la línea es “factible”, entre otras cosas, porque en el Ministerio de Transportes “ya hay grietas” y no hay esa unanimidad férrea en su estrategia de apoyar la alta velocidad en detrimento del tren convencional.

Es por ello, que no duda en hablar que hay por delante un “futuro extraordinario” en torno al tren, porque “tenemos a nuestro favor y en contra de las decisiones del Ministerio de Transportes a la Comisión Europea, que va a decidir el próximo año cuál es la red básica ferroviaria en la Unión Europea, y por lo tanto en España; de ahí que haya que conseguir que el tren convencional ocupe su sitio”.

Y es que para Ordóñez hay que seguir luchando para reabrir las líneas que ahora están cerradas, como es el caso de la línea Aranjuez-Cuenca-Utiel, la del Tren de la Plata o la Guadix-Baza-Almanzora-Lorca, porque “parece que estamos en el Tercer Mundo en vez de en Europa”. Todo ello sin olvidar, a su juicio, de los argumentos incoherentes del Ministerio, que, por un lado, cierra la línea de Cuenca y asegura que no puede usarse para el transporte de mercancías por la pendiente del tramo de Buñol y, sin embargo, sí apoya el tráfico de mercancías por la línea Sagunto-Teruel-Zaragoza, donde las pendientes son aún más pronunciadas.

Los concentrados han querido decirle al Ministerio que debe de dar marcha atrás en sus postulados de quitar este servicio ferroviario y sustituirlo por autobuses, porque, entre otras cosas, “éstos están para llevar a las personas al tren y recogerlas, pero no para sustituir al tren”.

La Coordinadora Estatal por el Tren Público, Social y Sostenible abogan por hacer todo lo posible para que el tren convencional ocupe su sitio en el sistema multimodal de transportes, en el que su esencia sea el tren, la bicicleta y la peatonalización, mientras que los otros medios de transporte, como el autobús, el avión o el barco, sean complementos de estos tres medios básicos.

Para Ordóñez queda mucho por hacer, por lo que asegura que trabajarán para que de cara a las próximas citas electorales, la sociedad pueda llegar a influir en este asunto y el Ministerio apuesta por el tren convencional, un medio de transporte público al servicio de la gran mayoría de la sociedad.

Creen que todavía es posible reabrir la línea Aranjuez-Cuenca-Utiel

Desde el viernes se ha venido lanzando un mensaje de esperanza para los defensores del tren convencional, según informa Las Noticias de Cuenca, en el marco del III Encuentro Estatal 'Tren y Clima'. El portavoz de esta coordinadora estatal, José Luis Ordóñez, cree que no hay que tirar la toalla y aún hay posibilidad de reabrir la línea Aranjuez-Cuenca-Utiel. Considera que es posible, sobre todo si se tiene en cuenta que “la Comisión Europea no está alineada al 100% con los postulados del Ministerio de Transportes, como así quedó claro en la última visita de la representante del Comisionado para el Corredor Mediterráneo”.

Son motivos más que suficientes, a su juicio, para continuar defendiendo el tren convencional y, por esta razón, asegura se ha traído el III Encuentro Estatal a Cuenca, “para defender que siga este servicio ferroviario por la línea normal, que no convencional”.

Un 'Manifiesto de Cuenca' que sirva de guía

El encuentro del fin de semana en Cuenca, decía, es “un acto de deliberación y reflexión para sacar conclusiones y darnos mayor capacidad de movilización y mayor influencia en el resto de la sociedad y en las administraciones, desde las europeas y estatales hasta las autonómicas, provinciales y municipales. Y es que, según ha dicho, se pretende sacar de esta cita un manifiesto, el Manifiesto de Cuenca, que sirva de guía para la actuación en los próximos años.

En términos similares se pronunciaban tanto el portavoz de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril Público y Social de Cuenca, Francisco de los Cobos, como la concejala del Grupo Cuenca en Marcha!, María Ángeles García, que han dejado claro que este encuentro estatal debe de servir para marcar una estrategia en todo el territorio nacional en torno a la defensa de los servicios públicos y de las personas más necesitadas, que son, precisamente, los usuarios del transporte público.

Y, en este sentido, el portavoz de la Coordinadora Estatal por el Tren Público, Social y Sostenible ha querido ir más allá y ha puesto el foco en la necesidad de que la sociedad pueda influir en los partidos políticos y sus candidaturas de cara a las próximas citas electorales; eso sí, tal y como ha remarcado, “para influir positivamente, claro”.

Ordóñez insiste en criticar la gestión del Ministerio de Transportes, asegurando que “está equivocado en sus estrategias y alguien tiene que decírselo”. Es por ello que ha hecho hincapié en la propuesta de la Coordinadora Estatal, que pasa por la apuesta por una red ferroviaria nacional, que se apoye en los servicios de cercanía, regionales, de larga distancia y mercancías, así como en trenes nocturnos. Una propuesta que, tal y como ha concluido, incluye el cómo, el cuándo y los instrumentos tecnológicos necesarios para que el Ministerio pueda llevarla a cabo.