Muere a los 95 años el arquitecto Oriol Bohigas, ideólogo de la Barcelona olímpica

Oriol Bohigas, arquitecto, urbanista y una de las principales figuras de la arquitectura contemporánea española, ha fallecido este martes en Barcelona a la edad de 95 años. Considerado como uno de los ideólogos de la llamada “Barcelona olímpica” que se abrió al mar y al mundo, fue responsable de obras icónicas de la ciudad como la Vila y el Port Olímpic (1992) y el edificio del Disseny Hub en la plaza de les Glòries (2013).

La consellera de Cultura, Natàlia Garriga, ha confirmado el fallecimiento. “Gracias, Oriol, por todo lo que has hecho para el país. Te recordaremos siempre. Mi más sentido pésame a la familia y amigos”.

Activo hasta pasados los 80 años, Bohigas fue uno de los arquitectos más destacados de la ciudad y con prestigio en toda Europa, donde realizó numerosos proyectos. Su trabajo cuenta con multitud de obras que van desde la arquitectura residencial hasta centros escolares y universitarios, pasando por estaciones o incluso comisarías como la reestructuración de los cuarteles de Roger de Llúria (2001).

Graduado en la Escola Tècnica Superior d'Arquitectura de Barcelona en 1951(en 1961 obtuvo la diplomatura de Urbanismo), perteneció a la llamada Escuela de Barcelona y fue uno de los fundadores del Grupo R, que pretendía difundir en España las tendencias culturales y arquitectónicas europeas durante la segunda mitad del siglo XX.

Activo opositor al franquismo, en los años setenta fue miembro de la llamada 'gauche divine', el movimiento intelectual progresista barcelonés en el que se mezclaban profesionales, artistas, escritores e hijos de la burguesía que alternaban en la zona alta de la ciudad. En 1966 fue expulsado de la Escuela de Arquitectura de Barcelona, donde impartía clases, por participar en actividades de oposición al franquismo.

Siempre cercano al ala catalanista del PSC (aunque sin carnet) y amigo íntimo de Pasqual Maragall, fue también concejal de Cultura del consistorio barcelonés entre 1991 y 1994 así como delegado de urbanismo entre 1980 y 1984. Durante los primeros años del procés se distanció del socialismo catalán y fue muy crítico con la postura del PSC y la supeditación al PSOE ante las reclamaciones de una parte de la sociedad catalana.

El arquitecto, que también presidió el Ateneu de Barcelona entre 2003 y 2010 (la sala de actos de la entidad lleva su nombre), legó todo su fondo documental al Arxiu Nacional de Catalunya el pasado septiembre.