Miles de personas se han vuelto a concentrar en Barcelona en la marcha unitaria convocada por entidades propalestinas para poner el broche a la jornada de huelga que se ha llevado a cabo en toda España. La Guàrdia Urbana las cifra en 15.000, mientras que la organización eleva la cifra hasta 50.000. El inicio de la manifestación ha sido en las puertas de la Estació de Sants a las 18h, desde donde ha arrancado una manifestación dirección a la Plaça Espanya.
Los concentrados han partido coreando consignas como “Israel no es un país, es una ocupación”. Han ido avanzando por el barrio de Sants, donde se han producido algunos disturbios y enfrentamientos con la policía. Mientras la marcha seguía su curso, un grupo de manifestantes se ha separado del grueso para lanzar objetos contra los cristales de un Burguer King, una de las empresas señaladas en la lista de la ONU de compañías que colaboran o se lucran con el genocidio y la ocupación israelí en Palestina.
Los Mossos d'Esquadra han cargado para desalentar a los manifestantes que, a pocas calles, han hecho una pequeña barricada con contenedores a los que han prendido fuego, provocando una fuerte humareda. Los Bomberos de Barcelona han tenido que desplazarse hasta el lugar para apagar las llamas. La policía catalana ha comunicado la detención de 15 personas, de las cuales 11 eran menores.
Después de los incidentes, la marcha ha seguido su curso sin más problemas hasta llegar al consulado de Israel, que se hallaba blindado por un amplio dispositivo de la policía catalana. Pero una vez allí, la manifestación ha vuelto a dividirse en dos: mientras el grueso más numeroso ha seguido hasta Travessera de Les Corts, donde se han leído parlamentos, un grupo más reducido se ha quedado en la calle Carlos III, donde se encuentra el consulado y contra el que han lanzado diversos cohetes.
En este punto, los Mossos han vuelto a actuar contra los manifestantes, que han cortado la calle con más barricadas, y les han intentado dispersar con gas pimienta. Los agentes han retenido a diversas personas y confirman que hay detenidos, pero todavía no concretan cuántos son.
Además de Barcelona, otras ciudades catalanas han acogido manifestaciones propalestinas. En Girona ha habido más de un millar de personas, en Tarragona unas 750 y en Lleida diversos centenares. En esta última concentración se han quemado muñecos de Pedro Sánchez y Benjamin Netanyahu.
También ha habido acciones en Manresa, donde los manifestantes han bajado a las vías de la estación y han obligado a cortar la circulción hasta Calaf de la línea RL4. Esta acción se ha dado simultaneamente a otra concentración a las afueras de la ciudad, en los alrededores del pabellón deportivo donde la noche de este miércoles se celebra un partido de básquet entre el Baxi Manresa y el Hapoel de Jerusalen. Centenares de personas han rodeado las inmediaciones de las instalaciones deportivas para intentar evitar que se celebrara el encuentro, pero finalmente no lo han conseguido.
El boicot al partido se ha dado tambien en Barcelona. Sobre las 16h los Mossos han desalojado con gas pimienta una sentada frente al hotel en el que se alojaban los jugadores del equipo israelí. Cuando los concentrados se han dispersado, los autocares del equipo han aprovechado para salir del hotel. Una hora después, han llegado a Manresa flanqueados de un fuerte dispositivo policial.
Tras la actuación de la policía catalana, los Comuns han anunciado que pedirán la comparecencia de la consellera de Interior, Núria Parlón, y del director del cuerpo, Josep Lluís Trapero, para que den explicaciones por una intervención “indiscriminada” y “desproporcionada”.
Una jornada de huelga
Barcelona, Mataró, Girona, Lleida, Manresa, Tarragona, Granollers... en decenas de municipios los piquetes de estudiantes y trabajadores han mostrado su apoyo a la población palestina desde primera hora de este miércoles. Además de los habituales cortes de carreteras y accesos al Puerto de Barcelona, que han provocado colas kilométricas en las principales arterias viarias, las protestas han querido señalar a algunas empresas.
En Mataró (Barcelona), un grupo de jóvenes ha irrumpido en un establecimiento de McDonalds y ha acusado al restaurante de mantener “un negocio cómplice con el genocidio”. En Lleida, estudiantes han bloqueado durante unas horas la entrada a un Carrefour. Las protestas más numerosas se han registrado en Barcelona, con sendas manifestaciones por la mañana convocadas por los sindicatos CCOO y UGT y colectivos estudiantiles y CGT y la IAC.
En esta última protesta, se han registrado algunos momentos de tensión entre estudiantes y los Mossos d'Esquadra cuando el piquete ha lanzado petardos y objetos a la línea policial que impedía la entrada de los manifestantes en la estación de Sants. La marcha se ha disuelto tras algunas barricadas por las calles de Sants.
Sin incidentes, centenares de personas se han manifestado por el centro de Barcelona a favor de Palestina y contra Israel, convocadas por CCOO y UGT. Los sindicatos han entregado un manifiesto en la delegación de la Comisión Europea en Barcelona para reclamar la ruptura de relaciones con Israel.
La secretaria general de CCOO en Catalunya, Belén López, ha reivindicado la huelga como un “paraguas” para que los trabajadores muestren solidaridad con Palestina, mientras que su homólogo en UGT, Camil Ros, ha reclamado “una paz verdadera y duradera”.
En el transporte ferroviario, el servicio de Rodalies de Renfe ha informado de que desde primera hora de la mañana se registran “supresiones” de trenes por la huelga y que el servicio también puede verse alterado por la tarde.
Los paros sindicales de este miércoles en todos los centros de trabajo de España han sido convocados por parte de distintos sindicatos: Comisiones Obreras y UGT han registrado una convocatoria de paros parciales de dos horas en cada turno de trabajo y CGT ha convocado una huelga general de 24 horas a nivel nacional.
Esta protesta llega después de meses de continuas denuncias por parte de los sindicatos y de protestas multitudinarias en toda la geografía española. Para dar un blindaje legal a la participación, sin posibles represalias o impedimentos en algún centro de trabajo, las centrales de trabajadores han convocado estos paros.
Las movilizaciones se mantienen pese al alto el fuego iniciado la semana pasada en Gaza y al plan de paz firmado en Egipto. Comisiones Obreras y UGT, han señalado que “ningún plan puede considerarse de paz duradera si excluye al pueblo palestino, si perpetúa la ocupación o si ignora las resoluciones de Naciones Unidas”. Por su parte, el sindicato CGT ha reafirmado su convocatoria por la violación por parte de Israel de anteriores acuerdos, además de recordar que “en cualquier momento las tensiones pueden provocar más ataques”.