Barcelona, 14 jul (EFE).- La basílica de Santa Maria del Pi de Barcelona ha colocado en su altar una instalación de arte urbano, obra del artista Octavi Serra Arrizabalaga, más conocido por su nombre artístico, Aryz.
La obra, titulada “Crianza”, quedará oficialmente inaugurada este viernes con la actuación del músico, compositor y productor Raül Refree, ante lo que Aryz ha bromeado: “Es la primera vez que me bendicen una obra”.
El origen de esta iniciativa tuvo lugar hace unos meses cuando apareció en la pared de la basílica una pintada que poco después fue limpiada por los servicios municipales.
Viendo algunos paralelismos entre el discurso de la Iglesia y el de los artistas callejeros, el archivero y conservador de la basílica del Pi, Jordi Sacasas, se puso en contacto con el colectivo de arte urbano B-Murales, para concretar una colaboración “más reglamentada” al estilo de otras experiencias similares como en la iglesia de los jesuitas de San Pedro en Colonia (Alemania).
El resultado es “Crianza”, en la que Aryz dibuja a una mujer con un niño en sus brazos, una imagen que forma parte de la iconografía cristiana, pero que también puede ser interpretada como la de una mujer y su niño que llegan por el Mediterráneo, como apunta el rector de la iglesia.
El artista pretende concienciar sobre la necesidad de “empatizar con el otro”, sabiendo que su papel es crear una obra que “la gente acabará interpretando a su manera”.
Aryz llevó el arte urbano de la Barcelona de los 2000 a otro nivel desde unos inicios en los que llevó a límites insospechados su obra del contexto urbano, antes de profundizar en su trabajo de estudio.
Estos dos ámbitos le valieron un reconocimiento y una proyección mundial, con varias exposiciones individuales y piezas murales en las calles de Marruecos, Japón, Francia, Reino Unido, Finlandia, Dinamarca, Polonia, China, Madagascar, Estados Unidos, Ucrania y Venezuela, entre otros países.