“Aznar celebró ayer la derrota técnica como una victoria, recordando a Felipe González en 1996. Tenía buenos motivos para estar exultante ya que el PP ha sufrido un muy escaso desgaste por la guerra de Irak, de suerte que ha logrado conservar la gran mayoría de sus feudos de poder. La única excepción ha sido la Comunidad de Madrid, donde PSOE e IU podrán gobernar por un apretadísimo margen, mientras que, por el contrario, el ex ministro Jaume Matas recupera Baleares para el PP.
Los resultados en las elecciones municipales y autonómicas de ayer son una victoria moral para el PP, aunque el PSOE puede atribuirse el triunfo fáctico, ya que registra un avance que le permite situarse como el partido más votado en toda España, lo que no sucedía desde 1993. (…) El resultado es también globalmente aceptable para Rodríguez Zapatero, que se consolida como líder de la oposición al mejorar los resultados de su partido en las municipales de 1995 y 1999. El PSOE, unido sin fisuras en torno a su secretario general, aventaja al PP en más de 200.000 votos a nivel nacional -que se quedan en la mitad si se suman los de UPN-, lo que justifica la satisfacción de anoche de sus dirigentes. Pero el escaso margen en unas circunstancias tan favorables como éstas demuestra las dificultades que va a tener que superar el PSOE para derrotar al PP en las generales del año que viene.”