ENTREVISTA Músico

Kevin Johansen: “Los jóvenes están cambiando muchas cosas para mejor o al menos lo intentan”

La ironía desprovista de mala baba caracteriza a Kevin Johansen (Fairbanks, Alaska. 1964). Cuando habla de su último disco, Tú ve, confiesa que por una vez ha dejado salir a la luz a ese que una noche quiere corear sus temas favoritos en buena compañía. Para este trabajo, ha buscado socios como su ídolo David Byrne a la cabeza, para versionar canciones de una lista de artistas inmortales: Caetano Veloso, Lou Reed, Leonard Cohen, Violeta Parra. En la aventura le acompañan Natalie Lafourcade, Silvia Pérez Cruz, Jorge Drexler y su propia hija, Miranda Johansen.

La gira de Tú ve llega a España el próximo 1 de febrero (Barcelona) y se prolongará con conciertos en Madrid (2 de febrero), Bilbao (3 de febrero), Vigo (4 de febrero), Murcia (9 de febrero), Málaga (10 de febrero) y Sevilla (11 de febrero). Johansen se ha convertido en un músico capaz de llegar a diferentes generaciones y de mezclar estilos sin que el resultado final suene estridente. El artista nacido en Alaska confía en el futuro y cree que los jóvenes son la gran esperanza de cambio hacia un mundo menos caótico y más justo.

 Tú ve es tu primer disco de versiones que incluye una autoversión. ¿Por qué algo así en este momento?

Bueno, podría decirse que es un disco de versiones y aversiones entonces. Espero que la versión propia haya podido mejorar en algo al original, ja, ja, ja. ¿Por qué hacerlo ahora? Quizás porque ha salido ese pequeño Rod Stewart que todos llevamos dentro y que en las noches con amigos te lleva a cantar canciones famosas que te gustan de diversos estilos. Cuando traduces una canción se acaba convirtiendo en otra cosa aunque en realidad una buena canción nunca envejece. También, por otra parte, se trata de reconocer que un tema tan bueno siempre va a sobrevivir a cualquier mutación, aunque pueda ser tan sorprendente como el caso de la canción de Erasure presente en este disco.

¿Cuando surgió la idea de colaborar con David Byrne cómo llegaste hasta él?

Soy muy pudoroso con mis ídolos y por eso en este caso le pedí a Juan Campodónico (músico y productor uruguayo) que le escribiese para plantearle la idea. Nos respondió con una lista de 20 canciones mías que le gustaban para hacer la versión. Ahí demostró lo permeable que puede ser una leyenda de la música como él. A Juan le pintaba el tema “Muchas noches soñé contigo” y me preguntó si se podía hacer una versión en inglés. Yo venía dándole vueltas en la cabeza a esa posibilidad y al final, con la colaboración de David, salió esa versión. Además, después introduje en el disco una versión de “Heaven” (Talking Heads) en castellano, que era un tema que también me gustaba mucho. David confirmó la humildad de los grandes cuando vino a cantar conmigo el tema a un estudio de Nueva York y pude verle en una atmósfera muy relajada compartiendo con nosotros una cerveza de barril.

¿Qué tiene de especial esta nueva gira después de lo ocurrido estos tres últimos años con la pandemia y todo lo que vino después?

Lo que vemos ahora en las giras es una fiebre por la presencialidad. En la pandemia se hablaba de aquello de los trabajadores esenciales y los músicos somos trabajadores presenciales por naturaleza. El año pasado estuvimos en España en mayo y nos dimos cuenta de que la gente necesita ver a los músicos, es necesaria esa presencialidad. El público demanda esa adrenalina del directo y después de la pandemia nosotros nos estamos quitando un poco las ganas que teníamos de volver a tocar y ellos las de ver a los grupos actuar en vivo.

Tu trayectoria se caracteriza por la mezcla de idiomas, de estilos musicales, de artes. ¿Sientes la fusión como algo natural?

Mi historia geográfica es la del americano de Alaska a Argentina. En los años 60 y 70 hubo mucho intercambio cultural y eso habla bien de nosotros cuando tratamos de acercarnos a diversos géneros. Siempre habrá talibanes del buen gusto que tratarán de decirnos qué es lo correcto pero en el fondo también hay un pequeño talibán del buen gusto en cada uno de nosotros.

Vives en Argentina, un país en crisis permanente desde hace décadas, pero además viajas por todo el mundo y puedes ver realidades muy distintas. ¿Qué pasa por la cabeza de un músico siempre atento a la realidad social como tú cuando ves lo que está pasando en Latinoamérica, la guerra en Europa?

Lo que me dice todo esto es que se confirma que la plaga somos nosotros. A veces digo, medio en broma, que la pequeñez humana no para de crecer y desde luego que ves cosas que pasan en el mundo y lo primero que piensas es que somos incapaces de aprender de la historia. Como decía Murphy, un pesimista no es más que un optimista con experiencia. La esperanza es que veo un gran cambio cultural y social y hay gente joven que está cambiando algunas cosas para mejor, o al menos está intentándolo.

¿No hay que perder la esperanza?

Durante la pandemia, iba un día en bicicleta a hacer un streaming y pensaba que en realidad estaba negando la realidad porque trataba de hacer algo a pesar de todas las dificultades que existían para conseguirlo, pero después me di cuenta de que lo que estaba haciendo era transformar la realidad para convertirla en algo mejor. Creo que esa tiene que ser la actitud y veo a mucha gente en el mundo tratando de cambiar la realidad en lugar de negarla. Tengo hijas ya mayores que han podido vivir aquí en Argentina todo ese movimiento del “Ni una menos”, que ha sido tan importante. Tal vez la conclusión sea que el final del mundo está a la vuelta de la esquina y el principio de otro también.

 ¿Qué esperas de esta nueva gira por España y qué nuevos proyectos estás preparando?

De cara al futuro próximo estamos trabajando en un nuevo disco que también viene de la etapa de la pandemia. Es un trabajo de canciones propias que estamos redondeando y que esperamos que vea la luz en los próximos meses. De los conciertos por España espero que sean la cereza del postre que ha supuesto este Tú ve Tour.