El PP defiende el veto a camisetas contra el “decoro” en el Parlamento gallego para “debatir sin presiones”
El Parlamento de Galicia comenzó este martes el primer pleno del nuevo período de sesiones. El reinicio de la actividad parlamentaria ordinaria ha estado marcado por la aprobación, en la tarde del lunes, del documento que ratifica el veto a los actos reivindicativos en el recinto parlamentario. El documento, que recibió luz verde en la Mesa de la Cámara solo con los votos del PP, oficializa también la capacidad -ya existente de facto- de prohibir la asistencia de público a las sesiones parlamentarias con atuendos o imágenes contrarias al “decoro” de la institución.
Ese veto a las indumentarias que “menoscaben el decoro de la Cámara” ya ha comeznado a ser aplicado este mismo martes mientras, por parte de la oposición, continuaban las muestras de rechazo a un documento que, defiende la Presidencia, no hace más que “poner por escrito” restricciones ya existentes. Así, en el primero de los debates del nuevo curso político, en el que el PP frenó una iniciativa del PSdeG para “alejar por ley las pirotecnias y plantas de gestiones de residuos de las zonas residenciales”, los populares justificaron abiertamente el veto. Se trata, dicen, de que los miembros del legislativo puedan “debatir sin presiones”.
Después de que, desde el grupo Común da Esquerda, Antón Sánchez censurara la aplicación de estas medidas, desde el PP el parlamentario Gonzalo Trenor proclamó que “esta casa está para que podamos hablar sin que nadie se pueda sentir presionado”. “Para que podamos debatir sin sentirnos presionados ni intimidados” están “las normas” como esta, reitera el conservador, desde cuyo punto de vista “cualquiera puede llevar la camiseta que quiera”, pero “fuera de este hemiciclo”.
Permitir que el público vista camisetas reivindicativas cuando asiste a un pleno de la Cámara es para Trenor equiparable a que “pudiéramos poner pancartas” en el hemiciclo decididas sólo “por el grupo mayoritario”. “Esa protección para usted, como grupo minoritario, es más valiosa”, replicó al diputado de los comunes. El veto, no obstante, no se extiende a los propios diputados.
“Espero menoscabar muchas veces el decoro entendido como lo entiende el PP”, había advertido previamente Antón Sánchez, a cuyo juicio el grupo que sustenta al Gobierno de Alberto Núñez Feijóo entiende como contrario al decoro todo aquello que “lo moleste”. “La palabra decoro -reflexionó- fue un concepto muy utilizado durante la dictadura franquista, se le atribuía valores nacionales de ejemplaridad y de moral, la suya, la del franquismo”, evocó. “Igual -acusó- que pretenden ustedes imponer sus normas” aunque no sean capaces de explicar “qué menoscabo del decoro de esta Cámara” se produce cuando, por ejemplo, “la gente de Casalonga”, localidad próxima a Santiago, “manifiesta en una camiseta que no quiere una escombrera”.
Pocas horas después de este debate el veto volvía a salir a la palestra. Sucedía después de que, a través del vicepresidente del Parlamento, Diego Calvo (PP), la institución impidiera a vecinos de la Isla de Ons seguir desde la tribuna de invitados un debate sobre el parque de las Illas Atlánticas portando camisetas con el léemela Ons en loita [Ons en lucha]. Ante las protestas de la oposición el propio Trenor volvió a defender la medida argumentando, además, que en el período del bipartito (2005-2009) existían más restricciones en el Parlamento por orden de la entonces presidenta socialista, Dolores Villarino.