Detenido en el sur de Francia el etarra Alexander Akarregi

La Gendarmería francesa ha detenido en la localidad gala de Compeyre, en el sur del país, al etarra Alexander Akarregi Casas, según han informado fuentes de la lucha antiterrorista, cuando intentaba robar un coche.

Akarregi fue extraditado a España por Holanda en 2004 y condenado posteriormente a cinco años de prisión por el alquiler del vehículo en el que los etarras Hodei Galarraga y Egoitz Gurrutxaga transportaron, el 23 de septiembre de 2002, por las calles de Bilbao un artefacto explosivo que hizo explosión y les causó la muerte.

Según la identificación provisional que se ha realizado, el arrestado podría ser Alexand r Akarregi Casas, que cumplió una condena de cinco años de prisión por colaborar con el «comando Vizcaya» de ETA y que en agosto de 2008 fue puesto en libertad.

Los agentes locales dieron aviso a a Gendarmería cuyos efectivos instalaron controles en uno de los cuales fue interceptado el etarra.

El lugar donde se ha producido el arresto de Akarregi está situado a apenas una decena de kilómetros de la localidad de Millau en la que, el 6 de octubre de 2005, un comando de ETA formado por tres hombres y una mujer armados con pistolas asaltaron las instalaciones de la empresa Fasver donde se apoderaron de ordenadores con material para a confección de pasaportes.

PUESTA EN LIBERTAD HACE 6 MESES

Natural de Bilbao, de 32 años de edad, Alexander Akarregi ha cumplido dos condenas. La primera de ellas le fue impuesta por participar, en 1993, cuando tenía 16 años, en una paliza propinada por un grupo de radicales a un agente de la Ertzaintza en las fiestas de Bilbao. La Audiencia de Vizcaya le impuso una pena de dos meses de arresto mayo y 30 días de arresto menor. También se le relacionó con cciones de «kale borroka», y en 1994 fue detenido por protagonizar incidentes durante la celebración de un juicio co tra un militante de la organización juvenil ilegalizada Jarrai.

El 20 de septiembre de 2002, Akarregi alquiló en Santurce un Ford Fiesta que prestó a los miembros del «comando Vizcaya» Hodei Galarraga y Egoitz Gurrutxaga, que fallecieron al estallar una bomba que transportaban en el vehículo. En el coche se encontró, además, la pistola con la qu había sido asesinado el magistrado José María Lidón. Akarregi se dio a la fuga cuando tuvo noticia del suceso en el que habían muerto los dos miembros de ETA.

La policía holandesa detuvo a Akarregi el 10 de julio de 200 en el aeropuerto de Ámsterdam cuando se disponía a tomar un vuelo con destino a Venezuela. El 23 de septiembre del asado año se celebró ante los tribunales holandeses el juicio de extradición contra Akarregi. La solicitud de la Juticia española fue apoyada por la Fiscalía holandesa que acusó al presunto etarra de pertenencia a banda armada y tenencia de explosivos con resultado de muerte. El fiscal sostuvo que el acusado conocía el uso que iban a hacer los dos miembros de ETA fallecidos del vehículo que les había prestado. La sentencia se conoció el 8 de octubre de 2003 y fue favorable a la extradición de Akarregi a la Justicia española.

El 7 de enero de 2004 fue extraditado y encarcelado. Ese mismo año, en diciembre, la Audiencia Nacional le condenó a cinco años por colaboración con el «comando Vizcaya» de ETA. Los tribunales consideraron probado que el acusado alquiló el coche y lo prestó a los dos etarras «con la finalidad de que fuera utilizado por los integrantes de l organización ETA».

Akarregi proporcionó a los terroristas la documentación del vehículo, «entre la que se encontr aba una fotocopia del adeudo domiciliado de la compañía de seguros», en la que la policía encontró sus huellas.

El de agosto de 2008, Alexander Akarregi fue puesto en libertad tras haber cumplido la condena impuesta.