Escuchar a la ciudadanía (o cómo dar la vuelta a un acto de campaña)
Los mensajes políticos se suceden en estos días de campaña y los ciudadanos nos convertimos en receptores de promesas y proyectos de unos y otros en busca de la confianza que se traduzca en votos. Sin embargo, no resulta habitual que sean los políticos los que se sienten a escuchar a sus vecinos, los que reciban sus demandas y tomen nota de sus propuestas. Este es el método que ha puesto en marcha Cambia Logroño en esta campaña electoral, con encuentros vecinales en los barrios y con un acto central en el que los candidatos se pusieron al otro lado y la voz de la calle fue la protagonista.
El lugar elegido, la Plaza del Mercado de Logroño, tampoco fué casual. Echando la vista cuatro años atrás, la misma plaza se convirtió en el emblema de la protesta social, el altavoz de la sociedad, el hogar de los que quisieron hacerse oir en aquel 15 de Mayo de 2011. Entonces los políticos retaban a los ciudadanos indignados a implicarse en política, hoy ese proceso se ha hecho realidad.
Cambia Logroño quiso dejar claro con este acto, y así lo manifestaron varios de sus candidatos, que desde las instituciones no se puede conseguir todo, que la lucha en la calle no sólo es necesaria sino que resulta imprescindible. Hubo voces incluso que apelaron a la desobediencia civil cuando se imponen medidas que hacen que una ilegalidad resulte también una injusticia. Los diferentes movimientos sociales de Logroño aceptaron el reto.
La Marea Blanca recordó que, “pase lo que pase el domingo”, seguirá estando en la calle para luchar por la sanidad pública. Señalaron que actualmente el contacto con las instituciones es “prácticamente nulo” y que los políticos sólo ejercen la acción-reacción a través de notas de prensa, pero nunca con el diálogo que se demanda desde la calle. Señalaron que “la lucha es un camino largo, tranquilo pero ascendente” y recordaron que en Madrid la Marea consiguió paralizar la privatización de seis hospitales, pero no cambiar las leyes, por lo que su presencia sigue siendo imprescindible.
Desde la Plataforma por la Hepatitis C, uno de los movimientos más recientes, se apeló al rigor de las instituciones ya que, según señalan, el Gobierno de La Rioja miente continuamente a afirmar que el tratamiento está llegando a todos los enfermos “cuando sólo se está atendiendo al 5% de los 5.000 afectados que hay en la comunidad”. ¨Y señalaron especialmente a la falta de atención a poblaciones especilmente vulnerables como los reclusos y los inmigrantes. Su mensaje fue directo al asegurar que “este domingo hay que hacer que el consejero que no quiere reunirse con los colectivos no vuelva a tener oportunidad de hacerlo”.
También se habló de educación. La Marea Verde planteó un amplio catálogo de demandas, desde un mayor equilibrio en la escolarización con la apertura de nuevas líneas en determinados centros a la apertura de los comedores escolares en periodos vacacionales, la educación gratuita de 0 a 3 años o la recuperación de las inversiones para la escuela pública que han ido perdiéndose en los últimos años a favor de la privada.
Jorge y Pablo, los dos jóvenes encausados por su participación en la huelga general del 14N, acudieron a este acto en representación de Stop Represión. Recordaron que siguen pendientes de un juicio en el que se les piden 7 y 9 años de prisión, relataron su proceso, desde las detenciones a los malos tratos y posterior criminalización que siguen padeciendo cada día. A través de la plataforma que les apoya, mostraron su rechazo a la Ley de Seguridad Ciudadana y a la Ordenanza Cívica de Logroño, “cuyo único objetivo es restringir las libertades e implantar el miedo”. Pidió a los miembros de Cambia Logroño que “no pierdan nunca la calle porque entonces no habrá nada que hacer”.
La Marea Naranja mostró su preocupación por el creciente nivel de privatización de los servicios públicos y la dejación de funciones creciente en la administración. Señalaron que la Ley de Dependencia “era maravillosa cuando empezó pero las diferentes reformas la han ido machacando” y que lo más básico es el alimento de la gente por lo que “hay que luchar porque toda la sociedad lo tenga garantizado por sus propios medios y no a través de la caridad mal entendida”.
También la PAH (Plataforma de Afectados por la Hipoteca) recordó su nacimiento en La Rioja de forma casi paralela a aquel 15M. Desde entonces sus demandas se han ido ampliando a medida que se iban planteando nuevas necesidades como el incremento de los desahucios por impago del alquiler o los casos de pobreza energética. Recordaron también la puesta en marcha de su obra social que trata de recuperar edificios vacíos y rehabilitarlos para aquellas familias a las que sólo les queda la ocupación.
En esta asamblea hubo también un espacio para las trabajadoras de Lanas Stop que pudieron alzar su voz, después de siete meses sin cobrar sus nóminas, para explicar a los presentes que se sienten “víctimas de la impunidad de los empresarios amparados por la ley, nuestro empresario tiene 20 empresas y esta ahora no le cuadra, por eso quiere llevarnos al a quiebra para no tener que pagarnos el sino el Fogasa”.
Así, una tras otra, fueron escuchándose las diferentes voces de la calle. Cambia Logroño se mostró en este foro como un interlocutor atento y dispuesto a llevar estas realidades a las instituciones. La idea final no es convertir estas opiniones en papeletas sino que el voto pueda ser fiscalizado por esos mismos ciudadanos desde la calle, desde la lucha, a partir del día 25.
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