Una cocina indispensable

La organización Cocina Económica de Logroño repartió durante el año pasado 48.016 comidas en su comedor social, lo que supone casi 10.000 más que el año anterior. El alcalde de Logroño, Tomás Santos, ha renovado el convenio de colaboración con el presidente de esta entidad, Domingo Álvarez Ruiz de Viñaspre, durante una rueda de prensa a la que también asistió la concejala de Derechos Sociales, Pilar Criado.

El comedor social de Cocina Económica atendió durante 2007 a 2.678 personas, la mayoría hombres españoles, que carecían de recursos económicos para poder pagar una comida o una cena. El Ayuntamiento de Logroño destinará este año 157.708 euros para este servicio, lo que supone un 8% más que el año anterior.

También se incrementa el precio por ración, que pasa de 4,35 euros a 5 euros, y que además de la comida, incluye una atención social integral a los usuarios.

En total, el Consistorio logroñés aportará este año casi 557.000 euros a Cocina Económica, 40.000 más que en 2007, con los que financiará parte de los servicios que presta esta entidad en el Casco Antiguo. Así, el centro de acogida de la calle Ruavieja, donde se desarrolla el proyecto Alasca (Alternativa a las calles) contará con 207.000 euros, mientras que el alojamiento alternativo de la calle San Gil recibirá 130.000 euros para financiar las treinta plazas concertadas que se utilizan en casos de desahucios o ruinas. Gracias al acuerdo alcanzado con Ibercaja, también habrá ayudas municipales para destinar los 72.000 euros necesarios para la guardería “Entrepuentes”, donde acuden 57 niños. Santos aseguró que en noviembre se renovará el convenio para financiar el funcionamiento de esta guardería.