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Rioja2

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CB. Illescas Urban CLM.: Adrián Casas (22), Ondrej Kohout (-), Jonathan Machuca (3), Alexey Chubrevic (15), Julio Sosa (7). También: Javier Simón (-), Conde Cheik (2), Héctor García (6), J.M. González (4), Juan Martín Orellana (5).

Knet Rioja: Kyle Swanston (12), Witt (10), Borja Arévalo (8), Mesa (19), Sidney de Santana (8). También: Ott (-), Alberto Rodríguez 'Chufi' (3), Roberto Molina (2), Herrero (2), Quique Suárez (18).

PARCIALES Primer Cuarto: 20-21 Segundo Cuarto: 15-17 (35-38) Tercer Cuarto: 14-29 Cuarto Cuarto: 15-15. ÁRBITROS: Fajardo Panizo (Madrid), Guillén López (Granada). Eliminados: No hubo. PABELLÓN: San Pedro. 200 espectadores

ILLESCAS - KNET RIOJA, 64-82

El Knet Rioja seguirá en lo más alto de la tabla. El rebote ofensivo le hizo mucho daño al Knet durante el primer tiempo y por eso el Illescas compitió con opciones hasta el descanso, pero tras el paso por vestuarios el equipo riojano tuvo un comienzo fulgurante con una defensa muy intensa y mucha recuperación de balón que lo llevaó a sentenciar el resultado del partido mucho antes de su final, pues los últimos minutos sobraron totalmente ante un ventaja de los Jesús Sala de más de veinte puntos.

El partido dio comienzo con una canasta de Borja Arévalo a la que respondió el local Adrián Casas con otra desde más allá de la línea de tres puntos. Ambas fueron tremendamente indicativas de lo que sucedería después, especialmente hasta la llegada del descanso.

La poca presión defensiva en este primer cuarto fue visible, por parte de unos y otros, y de ahí que el resultado de los dos al final del primer acto fuera alto. Eso sí, los equipos rivalizaron en la forma de conseguir sus puntos, en su forma de atacar porque la defender fue casi idéntica e inexistente.

El Illescas estuvo algo más acertado en el tiro exterior y mediante sus lanzamientos de mediana distancia consiguió sus mayores ventajas; mientras que los riojanos no acertaron tanto en esa faceta pero sí y mucho en las penetraciones a canasta y en el tiro interior, donde ganaron con claridad. La primera ventaja de los de Sala en el marcador, tras la del inicio, fue el 9-10 a falta de cinco, cuarenta y cinco. Los últimos compases fueron un intercambio de canastas hasta llegar al ajustado 20-21 con el que terminó este primer cuarto.

En el segundo hubo unos primeros instantes de errores, algunos de bulto, y de mayor intensidad defensiva a lo visto hasta el momento. Roberto Molina colocó el 20-23 pero Martín Orellana igualó el electrónico con una canasta de tres puntos. Replicó Suárez y al poco se llegó al 25-29 a falta de seis cincuenta. Después, el juego fue un despropósito con un rosario de imprecisiones con lo cual el porcentaje de acierto de los dos equipos bajó respecto al primer cuarto. En este intercambio final González colocó el 33-32 a falta de tres veinte pero Quique Suárez de nuevo cogió el mando de las operaciones y puso la última canasta para el 35-38 final.

El inicio del tercer cuarto vio una canasta de Mesa y un dos más uno de Witt que puso el 35-43.

Después colocarían el 35-45 viendo la primera ventaja de diez en el marcador para los riojanos. A partir de aquí los locales no se resistieron a abandonar el partido con Alexey Chubrevic, su pivot mastodóntico, quien mantuvo a los locales en el marcador por unos instantes más. A falta de cuatro cuarenta y cuatro seguían los diez para los visitantes, 46-56 con una canasta de Suárez, e incluso triplazo de Ott 46-59 casi desde su casa. Siguió aumentando diferencias con muchos errores en las filas illescanas, que dejaron notar su gran juventud. La brecha llegó al 49-67 con tiempo muerto del entrenador illescano Sergio Jiménez para frenar la sangría de los suyos.

En el último y definitivo, excelente canasta de Kyle Swanston que colocó veinte puntos arriba al equipo riojano, 49-69. Adrián Casas cogió la responsabilidad local pero ya era imposible, los minutos de la basura también los jugó bien el cuadro de Sala. 62-82 a falta de un minuto y poco más.

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