Tranquilidad compartida

Por primera vez en más de nueve meses el fútbol riojano de Segunda B afronta una semana de tranquilidad deportiva total. Y es que ese es el tiempo que Logroñés y Logroñés CF han necesitado para conseguir que sus dos hinchadas afrontaran simultáneamente siete días sin estar en los puestos marcados en rojo de la clasificación de Segunda B. La última vez que eso ocurrió fue en la jornada 38 del curso pasado. Ambos habían certificado su continuidad.

A más de uno, que en esto del fútbol hay muchos, le parecerá una semana aburrida por aquello de no poder 'disfrutar' viendo en el pozo a su mayor rival pero a sus verdaderos protagonistas, a los que se fajan sobre el verde domingo a domingo, seguramente que prefieren que la paz sea compartida. Así Logroñés y Logroñés CF han hecho coincidir en el tiempo dos de sus mejores rachas de resultados que les han permitido pasar de las fauces del descenso a contar con cinco y tres puntos de ventaja, respectivamente, sobre el primer equipo en puesto de descenso directo, el Palencia.

El Club Deportivo disfruta de su momento más dulce de la temporada. Dos victorias y cuatro empates en los últimos seis partidos conceden a los de Agustín Abadía su mejor racha de resultados. No caen desde el pasado 10 de febrero cuando lo hicieron en Las Gaunas ante el Barakaldo y en la segunda vuelta sus tres victorias y cinco empates les convierten en el noveno mejor equipo con quince puntos gracias a los doce goles a favor y diez en contra.

Y si la realidad del Club Deportivo mejora con el paso de las semanas la de su antónimo capitalino, el Logroñés CF, hace lo propio. El equipo de Rafa Sáez mejora en la segunda vuelta los resultados de los de Abadía después de haber sumado quince puntos en cuatro triunfos y tres victorias (diez goles a favor y cinco en contra).

Por segunda vez en la temporada el CF afronta una semana repleta de tranquilidad. Sólo después de la disputa de la jornada 21, cuando ganó en Sestao 1-2, el equipo rojiblanco consiguió salir de los puestos de promoción y descenso. Fue el punto y final a la mejor concatenación de resultados del curso.

Entonces los de Sáez sumaron cuatro victorias y un empate en cinco partidos. Ahora, dos meses después y tras tres derrotas, han conseguido enlazar dos triunfos y sendos empates para, aferrándose a la llamada media inglesa, volver a ver a cinco equipos con peores guarismos que ellos. Ese es, también, el objetivo final.