Ultimátum a Setién

El Logroñés ha decidido ya ponerle fecha de salida a Quique Setién, si bien el entrenador aún tiene un pequeño margen de maniobra para enmendar la marcha del equipo. Tras la derrota ante el Guijuelo, la directiva comunicó a Setién que su crédito estaba a punto de agotarse y le puso plazo: o gana a Guadalajara o Huesca o tendrá que hacer las maletas.

Setién lleva ya varias semanas siendo cuestionado. Los movimientos realizados por el presidente del Logroñés, Juan Hortelano, para incoporar nuevos inversores al equipo ya trajeron un mensaje muy claro, casi utópico viendo la marcha del equipo: o se está en disposición de ascender o no habrá nuevo dinero. Desde entonces, la trayectoria no ha podido ir peor.

Desde el 27 de octubre, el Logroñés ha sumado un punto de quince posibles y suma ya tres derrotas consecutivas. Cifras pésimas y que tampoco se han visto matizadas por un juego esperanzador. Por todo ello, y esperando una reacción, la directiva ha decidido ponerle un plazo de reacción a a Setién.

Tras el partido de Guijuelo, el ultimátum se dio, inicialmente, para el encuentro contra el Guadalajara. Con los ánimos más calmados, la directiva habla ahora de quince días, habida cuenta de que el próximo partido será el segundo consecutivo que se juega fuera de casa y que, como visitante, el Logroñés no ha ganado aún a ningún equipo.

Si el equipo no consigue reconducir su marcha y el entrenador es destituido, la primera opción del Logroñés pasa por buscar a alguien de la casa, sobre todo por la delicada situación económica del club, que obliga a no hacer gastos extra hasta que el equipo pueda cobrar las subvenciones del Ayuntamiento de Logroño (para lo que debe ponerse antes de acuerdo con los acreedores públicos). Agustín Abadía es la opción preferida por el club.