ACNUR: España es un aliado tradicional de esta agencia en toda Latinoamérica

El representante regional de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados en América Central, Cuba y México, Jose Samaniego, aseguró hoy en Bruselas que “España es un aliado tradicional de ACNUR en Latinoamérica” y un puente entre la región y la Unión Europea (UE).

Para Samaniego, aparte de la movilización de recursos y del apoyo técnico que reciben para su labor, es clave el papel español en la “visibilización de la región” y ayudando a buscar “puentes de apoyo entre la UE, Centroamérica y Latinoamérica”.

En declaraciones a Efe, Samaniego dijo que “España cuenta también con un papel importante en el marco de la Unión Europea porque es el país que más cercanía cultural tiene con América Latina y su apoyo es clave para mantener Centroamérica dentro de una agenda cada vez más compleja y competitiva, como es la de la cooperación internacional”.

Samaniego participó en un debate en Bruselas sobre el Marco Integral Regional para la Protección y Soluciones (MIRPS), una iniciativa de cooperación entre seis Estados -Belice, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México y Panamá- que se comprometieron a trabajar conjuntamente para atajar de forma integral la crisis de desplazados forzosos que sufre la zona.

La iniciativa, presentada en octubre pasado en Honduras, tiene el objetivo de abordar el ciclo completo de desplazamiento, desde causas estructurales y soluciones en los países de origen al tránsito y la protección de las personas, así como la integración y soluciones en los lugares de destino.

Nicaragua y El Salvador decidieron no participar en el programa y se mostraron escépticos sobre los resultados de esta cooperación regional.

España apoya de forma activa este plan a través de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).

“En México, España fue el ente más importante en los últimos dos años”, afirmó a Efe el responsable de ACNUR en México, Mark Manly.

Durante el debate, los ponentes explicaron que la situación migratoria en Centroamérica es “muy compleja” porque los desplazamientos se producen por distintas causas y afectan a todos por igual: como países de origen, de tránsito y de destino, provocando en muchas ocasiones movimientos circulares de personas.

El responsable de la unidad de Desarrollo y Cooperación de la Comisión Europea (DEVCO), Stefano Signore, valoró durante el debate el espíritu de cooperación del plan y reconoció que para los actores dedicados al desarrollo es más complejo alcanzar ese nivel de colaboración por el riesgo de crear duplicidades con los sistemas nacionales.

Además de los desplazamientos por motivos socioeconómicos, la violencia de las pandillas callejeras o “maras” genera cada vez más migraciones forzosas.

ACNUR ha advertido de que un número creciente de hombres, mujeres y niños se ven a obligados a escapar de sus países atemorizados por estas bandas, autoras de delitos que van desde el narcotráfico, la extorsión, el robo y la violación hasta el asesinato.

“Hay muchos tipos de víctimas de la violencia: reclutamiento forzoso de adolescentes, violencia sexual contra las mujeres y crímenes de odio contra el colectivo LGTBI. También por sectores, como los periodistas o profesores”, según el representante de ACNUR.

De acuerdo a los datos disponibles, a finales de 2016 había 164.000 refugiados y solicitantes de asilo en el Triángulo Norte de Centroamérica, que integran El Salvador, Honduras y Guatemala, una cifra casi diez veces mayor a la de los otros cinco años.