Puigdemont cree “más urgente que nunca” que el Gobierno central se siente y hable

Ha sostenido que Sánchez no quiere discutir el asunto con Torra porque considera que no hay nada que negociar: “Están poniendo dinamita debajo de los puentes por los que corren las democracias, que son los puentes del diálogo”, ha aseverado en un artículo en la revista 'Time' recogido por Europa Press.

Considera que, para la mentalidad de partidos constitucionalistas, resolver el problema significa eliminarlo y no pasa por hacer concesiones, porque alcanzar compromisos y reconocer a la otra parte es ajeno a la cultura política española, según él: “Está probablemente más influenciada por el peso del imperio colonial que se extendió por el mundo con violencia y el exterminio. El compromiso se ve como cobardía. Los imperios no hacen concesiones, imponen condiciones”.

Puigdemont ha defendido que el movimiento independentista ha demostrado su fuerza tras la sentencia del juicio del 1-O: “Condenar a personas a 13 años de prisión, utilizar la represión como el único método de respuesta y llevar el trabajo de políticos a los juzgados se ha demostrado que no funciona en los dos últimos años. El remedio se ha demostrado peor que la enfermedad”.

Ha dicho que el resurgimiento de movilizaciones tras la sentencia ha sido “abrumador” y que el movimiento independentista seguirá existiendo hasta que se encuentre una solución a una crisis que no es interna sino internacional, según él, que considera que los demócratas europeos deberían sentir la obligación moral de involucrarse en el asunto.