Sesión densa la del juicio del procés de este martes. Seis horas y media dedicadas a la exhibición de los vídeos propuestos por las acusaciones con los que la Fiscalía y la Abogacía del Estado quieren sustentar los delitos de rebelión y sedición de los que acusan a los líderes soberanistas. En el caso del Ministerio Público, más que agresiones violentas generalizadas contra los agentes en los centros de votación del 1 de octubre, los vídeos intentan contribuir a que el tribunal recoja en su sentencia el “ambiente insurreccional” que, según los fiscales, desplegaron los acusados a lo largo y ancho de la geografía catalana para forzar la independencia unilateral. Escribe Oriol Solé.