Sánchez asegura que gestiona los insultos que ha escuchado en distintos espacios públicos y el odio que muchos ciudadanos le demuestran “con mucha paciencia”. “La polarización de España es asimétrica, yo no insulto, puedo defender mis ideas y criticar al adversario público”, ha dicho el presidente, quien ha pedido al resto de formaciones: “Dejemos de insultar, defendamos nuestras ideas con convicción y vehemencia, pero con un mínimo de respeto”.
Informa Iñigo Aduriz.