Han tenido que pasar más de tres semanas, críticas políticas de los pueblos afectados y una reunión de todos los actores implicados este lunes, pero la Junta de Andalucía ha anunciado oficialmente que se implicará en la fumigación de las zonas de riesgo de que habite el mosquito que ha provocado los casos de virus de Nilo detectados en la provincia desde el mes pasado.
Desde que el pasado 14 de agosto se aprobase el documento de trabajo que contemplaba que las fumigaciones se harían en tres fases, de las que solo la primera, según los ayuntamientos, sería asumido por ellos, la Junta no había accedido ni a dar su opinión pública sobre el caso ni a reunirse con los ayuntamientos, hasta que este lunes se llevó a cabo el encuentro.
La mesa del encuentro estuvo compuesta por el alcalde de La Puebla del Río, Manuel Bejarano, el de Lebrija, José Benito Barroso; el de Coria, Modesto González; el edil de Medio Ambiente, Parques y Jardines de Bormujos, José María Ruiz; la alcaldesa de Almensilla, Agripina Cabello; el alcalde de Camas, Rafael Recio; el de Mairena del Aljarafe, Antonio Conde; la alcaldesa de Gelves, Isabel Herrera; el concejal de Salud de Dos Hermanas, Juan Pedro Rodríguez; el alcalde de los Palacios, Juan Manuel Valle; el delegado de Bienestar Social de Sevilla, Juan Manuel Flores; el alcalde de Las Cabezas, Francisco Toajas; el alcalde de Morón de la Frontera, Juan Rodríguez; el alcalde de Utrera, José María Villalobos; la delegada de Salud y Consumo de Castilleja de la Cuesta, Ángela de la Rosa Alcántara, y el alcalde de Isla Mayor, Juan Molero.
Junto a ellos la viceconsejera de Salud y Familias, Catalina García; el Secretario General de Agricultura, Vicente Pérez; y el delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en Sevilla, Ricardo Sánchez; junto al director General de Salud Pública, José María Medina, y la delegada territorial de Salud y Familias, Regina Serrano.
Implicación económica
Del encuentro se extrajo que la Junta se implicará económicamente en la fumigación, aunque no ha trascendido la cifra que se invertirá. El Ayuntamiento de la Puebla del Río se ha felicitado del encuentro “tras la presión ejercida por los alcaldes para que la Junta de Andalucía asumiera sus responsabilidades y competencias en la situación”, y califica la reunión como “constructiva, y un primer acercamiento entre todas las partes para trabajar de la mano con el objetivo de acabar con la epidemia”.
De esta forma, la institución autonómica “escuchó a los alcaldes para terminar de definir un plan de actuación en el que la Junta se implicará económicamente”, y en el encuentro se profundizó sobre las medidas urbanas que están llevando a cabo en los pueblos para luchar contra el virus de la fiebre del Nilo.
En este sentido, el Ayuntamiento de La Puebla del Río, a través de Dedesin, va a continuar con sus labores de fumigación urbana y, mientras se concreta el proyecto de actuación de la Junta, agilizará la segunda fase que ya inició hace unos días con la contratación de una empresa especializada en la materia.
Preocupa especialmente la labor que ha realizar en las plantaciones arroceras, de ahí que los representantes de ese sector estuvieran pendientes del encuentro. Se trata, como señalan desde la Puebla del Río, de un grupo de personas que desde el principio se ha puesto a disposición de las fumigaciones. Ahora, de cara a los trabajos intensivos que se van a hacer, solo proponen que el producto que se use no sea contraproducente con la calidad del arroz. Lo demás, queda en manos de la Junta.
Decisión del Consejo de Gobierno
A expensas de que este miércoles se constituya la comisión entre todas las partes, el Consejo de Gobierno de la Junta dio oficialidad este martes, en tiempo récord, a los acuerdos de la reunión.
Así, la Junta asume la coordinación con todas las administraciones implicadas y la fumigación fuera del casco urbano, de acuerdo con el informe de los técnicos y en el territorio incluido en la Zona de Especial Actuación.
Los términos municipales ubicados en las marismas del Bajo Guadalquivir y las agrupaciones contiguas de municipios han sido declaradas ‘Zonas de especial actuación’, lo que supone la aplicación de determinadas medidas específicas que serán recogidas en un programa de actuación elaborado por los servicios municipales o la Diputación provincial, conjuntamente con la delegación provincial de la Consejería de Salud correspondiente o el distrito sanitario en quien delegue. El programa de actuación se elevará a la Consejería de Salud para su aprobación, la cual podrá recabar el asesoramiento técnico de aquellos profesionales que, en cada caso, estime oportuno.
Este miércoles se constituirá la comisión técnica encargada de elaborar los planes concretos de actuación en los municipios afectados por la declaración de zona de especial actuación y el plan estratégico de prevención para recibir las aportaciones de municipios, Diputación, Confederación y empresarios del sector arrocero.
Prevención
El programa de actuación debe tener implantación desde el próximo año, y posteriormente mantener una continuidad anual. Se trata, no solo de controlar el brote actual, sino de tener todo previsto para años posteriores como prevención, más que como tratamiento de choque.
Se tendrán en cuenta desde la asunción de la existencia de los factores ambientales, naturales, aves y vectores que van a seguir permitiendo mantener el ciclo zoonótico del virus de la fiebre del Nilo. Además, debe incluir distintas líneas de actuación que abarquen desde el diagnóstico de la situación hasta el control de los mosquitos y larvas.