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La primera ola de calor del verano, con temperaturas que superan los 40 grados durante el día y que no bajan de los 25 por la noche, ha llevado a un grupo de vecinos de Palmete, organizado por la plataforma Barrios Hartos, a protagonizar una protesta en el centro de salud del barrio por los “continuos cortes de luz”, que vuelven a azotar a los barrios más desfavorecidos de Sevilla.
Los vecinos han explicado que el encierro en el centro de salud de Palmete, “que es el edificio público con aire acondicionado más cercano”, se debe a la “desesperación” provocada por las altas temperaturas y la falta de suministro eléctrico en sus hogares. “Somos un barrio con personas muy mayores, electrodependientes y sin medios para desplazarse”, lamenta. “Las casas son hornos; el agua sale caliente del grifo, y era o meternos aquí o nos morimos en nuestras casas”, asegura el portavoz de la paltaforma vecinal.
“Esta es la situación de muchos barrios obreros, con olas de calor insoportables, y mientras tanto, se está desarrollando una convención internacional para el desarrollo”, destacan desde Barrios Hartos, en alusión a la Cumbre de la ONU que se celebra estos días en el Fibes de la capital andaluza. Desde la plataforma aseguran que, durante los últimos 15 días, hay vecinos que han tenido apenas “dos o tres horas de luz al día”, sufriendo cortes de hasta 25 horas consecutivas en algunos casos.
No se iránhasta que las instituciones “den un paso adelante”
La plataforma Barrios Hartos ya ha llevado a cabo otras movilizaciones por esta situación desde que empezó el verano. Hace una semana, cortaron el tráfico en la rotonda junto a la avenida San José, en Palmete, para exigir soluciones. Además, el pasado viernes entregaron firmas en el Centro Cívico de La Plata y realizaron una manifestación por la zona de Su Eminencia. Desde la plataforma denuncian que la situación se está “extendiendo” a otras zonas de la ciudad, afectando a barrios como San Jerónimo, El Cerezo, Polígono Sur, Torreblanca, Bellavista, San Pablo, Padre Pío o El Cerro.
La protesta “no ha afectado a la asistencia sanitaria que se presta en este centro de salud”, uno de los que permanecerá cerrado por las tardes en los meses estivales, como señalan fuentes del SAS a Europa Press. Los vecinos que han protagonizado el encierro de este martes en señal de protesta insisten en que no se irán del centro de salud hasta que las instituciones “den un paso adelante” para aliviar la situación. “Estamos cansados de asambleas, movilizaciones y de que nada cambie, aquí resistiremos porque si nos echan de aquí, nos condenan a volver a un horno” aseveran desde Barrios Hartos.