El Congreso aprueba la Ley de Enseñanzas Artísticas, que integrará la formación circense y los videojuegos

El Congreso ha aprobado la Ley de Enseñanzas Artísticas, la primera que el Gobierno consigue sacar adelante esta legislatura. También es la primera norma específica para el sector, que la venía reclamando desde hacía décadas.

La norma no se ha votado en su conjunto porque ya venía aprobada del Senado. Este jueves se ha dedicado solo a darle la forma definitiva con la consideración (o rechazo) de varias enmiendas que se introdujeron en la Cámara Alta. En la votación de conjunto solo Vox y Junts se opusieron a la ley. El resto de grupos votó a favor.

La ley se aprueba con el peaje de haber enfrentado a Universidades y Escuelas Superiores por la equiparación de las formaciones que ambas instituciones ofrecen. La equiparación es más formal que novedosa (los títulos de ambas ya eran de educación superior), pero los decanos de Bellas Artes denuncian que se hace sin igualar también las exigencias de calidad mínima.

Durante el trámite parlamentario se han incluido algunas modificaciones –varias del PP–, como incluir la Escritura Creativa u otras disciplinas artísticas como el circo como enseñanzas artísticas superiores.

La norma incluye también novedades para el estudiantado: se incluirá el consejo de estudiantes en los centros y podrán acceder a las becas.

La ley engloba las enseñanzas de Música, Danza, Arte Dramático; Conservación y Restauración de Bienes Culturales; Artes Plásticas; a las que se suman ahora como novedad la Escritura Creativa y las Artes Audiovisuales.

“Se da la paradoja de que el mundo artístico y quienes trabajan para él son muy queridos por toda la sociedad, pero el reconocimiento real no siempre ha sido suficiente y no siempre ha sido justo. Esperemos que con esta ley podamos reparar, al menos en parte, ese insuficiente reconocimiento”, ha señalado la ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría, durante su intervención en el Pleno del Congreso.

Estas son algunas de las principales novedades de la norma.

Títulos equivalentes entre la Universidad y los centros superiores

Con la nueva norma se igualan las formaciones que ofrecen Universidades a través de las facultades de Bellas Artes y las de los centros superiores, uno de los principales puntos de fricción entre unos y otros (si no el más). Hasta ahora esa equiparación era ambigua, aunque ambas enseñanzas fueran superiores: los universitarios salían graduados y el alumnado de los centros superiores obtenía un “título superior”, equivalente al universitario pero no con el nombre de graduado.

La fricción viene porque los decanos de Bellas Artes se iguala por el lado de los derechos, pero no de los deberes. Se equipara sin igualar obligaciones, aseguran, sin exigir a los centros superiores el mismo control, el mismo mínimo de calidad en los estudios que se pide –y controla– a las universidades. Los centros superiores niegan la acusación y afirman que realmente la equiparación ya existía: ahora solo está un poco más clara sobre el papel.

Nuevos cuerpos docentes profesionales

La ley también propone crear cuatro nuevos cuerpos docentes: profesores y catedráticos de Enseñanzas Profesionales, equivalente a la Secundaria, y las mismas figuras para las Enseñanzas Superiores, las de nivel universitario. Hasta ahora los docentes pueden dar clases en ambas etapas; cuando se acabe de instaurar este sistema, cada uno tendrá su área, y además –esto será novedad– se les concederá un tiempo para la investigación –como a los profesores universitarios– que ahora no tienen.

Nuevas formaciones

Durante el trámite se ha aprobado una enmienda para incluir entre las formaciones superiores el circo –una reivindicación histórica del sector–, los videojuegos o la animación, además de la Escritura Creativa.

Huelga para los estudiantes

Además de establecer que los centros deberán incluir un consejo de estudiantes en su estructura, también se establece un nuevo derecho de los estudiantes que les permitirá realizar huelga, igual que se hizo en la Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU). La norma también se compromete a crear un Estatuto Básico del Estudiante de Enseñanzas Artísticas Superiores.