Las escuelas macedonias abren con un mes de retraso debido a la COVID-19

Skopje, 1 oct (EFE).- Los estudiantes de Macedonia del Norte han podido comenzar finalmente el curso escolar este jueves, un mes después de lo previsto debido al aumento de casos de coronavirus en la pequeña exrepública yugoslava.

El aumento de los casos a finales de verano y la incertidumbre llevaron al Gobierno macedonio a posponer el comienzo del colegio al 1 de octubre, una decisión que muchas familias lamentaron por la falta de medidas de conciliación.

Este inicio de curso estuvo marcado por un insólito silencio. No se permitieron los grupos o aglomeraciones de niños a las entradas a los colegios, que se realizó de uno en uno. Faltaron también los tradicionales abrazos y apretones de manos, que fueron desaconsejados para mantener el distanciamiento de seguridad.

Tan sólo los alumnos del primer, segundo y tercer curso de primaria atenderán clases de forma presencial. Tienen que ir en tres turnos, para evitar que haya más de 20 alumnos por aula.

Todos deben llevar mascarilla y mantener la distancia entre ellos y el profesor en todo momento. Se han establecido pasillos de una sola dirección en los colegios para evitar que durante las llegadas y salidas pueda haber contactos innecesarios.

Sin embargo, tan sólo la mitad de los 1.200 centros educativos de primaria y secundaria del país pueden organizar este tipo de clases presenciales. Los demás tendrán que atender clase por teleconferencia, mientras un tercer grupo de alrededor de 40.000 menores que viven en zonas rurales sin el equipamiento necesario o una conexión a internet adecuada seguirán las lecciones retransmitidas por la televisión pública.

“Ten cuidado y respeta a los profesores. Cuidaos a vosotros mismos y a los demás. Este curso escolar es muy diferente de los demás”, dijo hoy la ministra de Educación, Mila Carovska, en una escuela de primaria de la capital.

Hoy comienza además el curso académico para las universidades del país, que normalmente lo hacen el 1 de octubre, por lo que en estas instituciones no se han sufrido retrasos.

Las guarderías sí abrieron sus puertas a mediados de septiembre pero tan sólo se podía ver a unos pocos niños jugando en sus patios, ya que muchas familias decidieron dejarlos en casa de momento y pedir ayuda a otros familiares para cuidarles.

Desde que la pandemia de COVID-19 llegó al país balcánico en febrero, Macedonia del Norte ha registrado un total de 18.000 contagios, con unos 730 fallecimientos.

“La situación está empeorando. Esperamos un aumento de los nuevos casos en otoño. El principal motivo es el pobre cumplimiento de las medidas de prevención”, afirmó el ministro de Sanidad macedonio, Venko Filipche.