En un pueblo de la provincia de Siena, San Casciano dei Bagni, en la región italiana de la Toscana, a 60 kilómetros de la ciudad de Perugia y a 100 de la propia Siena, fueron encontradas una serie de esculturas de bronce, en un estado de conservación excepcional debido a las propiedades de las aguas termales y que es uno de los grandes hallazgos arqueológicos de la última década.
Los bronces de San Casciano dei Bagni, encontrados en dos fases entre 2022 y 2024, son un conjunto de piezas que ofrecen, además, detalles de los rituales de curación y prácticas religiosas tanto de la cultura etrusca como romana, y que se pueden visitar temporalmente este verano en la Galería James Simon de Berlín, en Alemania.
Los excepcionales bronces de San Casciano dei Bagni que las aguas termales conservaron en gran estado
Las esculturas de bronce ya de por sí son únicas y excepcionales, por un material que se ha fundido para usar en la fabricación de armas y otros materiales, por lo que muchas del mundo antiguo fueron destruidas, pero que en Italia tienen otro ejemplo en los bronces de Riace, en este caso griegas y de gran altura, ubicados en Reggio Calabria, en el sur.
Los primeros bronces de San Casciano dei Bagni fueron descubiertos en otoño de 2022, conservadas en un estanque de agua justo al lado de una fuente termal activa, en una zona que revivió en el Renacimiento de la mano de los Medici.
En diciembre de 2024 se encontraron cuatro nuevas estatuas de bronce junto a otro tipo de materiales y una colección amplia de monedas de diferentes etapas romanas que van desde la República hasta la época imperial, también de buen estado de conservación debido al lodo y aguas termales.
Ofrendas de rituales de curación en las termas etruscas y romanas
La gran cantidad de objetivos y esculturas de bronce eran ofrendas que los visitantes ofrecían para buscar la curación de las aguas termales y como protección divina, en muchos casos dirigidos a los niños y por eso se adentraban dentro de una de las fuentes de las termas.
Es por eso por lo que al tratarse de ofrendas de rituales han permitido conocer detalles de las prácticas religiosas y espirituales tanto de la época etrusca y romana, que además se ha podido separar claramente en dos fases temporales debido a antigua destrucción y reconstrucción en sus 500 años de uso.
Uno de los detalles que destaca es la cantidad de serpientes de bronce encontradas, una de ellas de hasta un metro de largo, que desvela como este animal se consideraba protector del manantial y que poseía un papel relevante en las prácticas adivinatorias, como también muestran los textos antiguos.
El próximo proyecto de un museo en San Casciano dei Bagni
Actualmente las esculturas de bronce se encuentran expuestas de forma temporal dentro de la Galería James Simon de Berlín, en Alemania, en la isla de los museos, después de exposiciones en Roma, Nápoles y Reggio Calabria.
Todo esto antes de que se lleve a cabo el plan que tiene el ministerio de cultura de Italia de un Museo Arqueológico Nacional de San Casciano dei Bagni en el Palacio del Arciprestazgo y la creación de un Parque Arqueológico termal alrededor del Bagno Grande.