Emilio Fresco dijo que el dinero sospechoso lo sacó ''de un cajón''
El informe realizado por la Agencia Tributaria y la policía judicial sobre las cuentas del exconcejal socialista, Emilio Fresco, determina que entre los años 2000-2001, fechas claves de la investigación, se produjo un descenso en las disposiciones en efectivo de sus cuentas bancarias que normalmente se destina a pagos corrientes en la familia.
Un hecho muy parecido al ocurrido con el exalcalde, Miguel Zerolo, quien durante meses apenas pareció vivir con 300 euros. El descenso en el caso de Fresco fue de 4.000 euros en cuentas y pagos en efectivos durante el año 2000, de más de 10.000 sin origen justificado y de 14.000 en 2001 también sin justificación. Además se localizó la adquisición de un vehículo al contando en 2002 por valor de más de 8.000 euros.
La explicación que ofreció el exconcejal durante su comparecencia ante la juez, Carla Bellini y la fiscal Anticorrupción, María Farnés Martinéz, es que hizo uso de “dinero que guardaba en un cajón”. Sin embargo a la policía no pareció convencerle esta explicación y en su informe señaló: “Teniendo en cuenta que los ingresos de la unidad familir proceden de nóminas y dietas abonadas en cuentas corrientes y de alquileres declarados que se mantienen constantes en los años señalados no se aprecia justificación para las variaciones en efectivo sin que conste su origen ni este se justifique con el movimiento de las cuentas corrientes ni con las rentas percibidas o declaradas en estos años”.
Fresco alegó además que contaba con un fondo personal de entre 8.000 y 10.000 euros que se nutre de alquileres que posee junto con sus hermanos así como de disposiciones en efectivo de sus cuentas bancarias y de fondos procedentes de venta de ejercicios anteriores y que oscilan entre las 500.000 pesetas y las 100.000.
Estos fondos según Fresco los retiró para guardarlas en un cajón y ser utilizadas a lo largo del año y siguientes, una práctica que la policía considera “totalmente anómala y contraria a toda práctica mercantil”. Fresco fue imputado por cohecho al sospecharse que había cobrado 20 millones de pesetas por dar su apoyo a la operación de compra del frente de Las Teresitas en contra de las órdenes de su partido. De la investigación desarrollada se desprende que los alquileres de inmuebles que posee junto con sus hermanos son “claramente insuficientes” para justificar ese fondo personal.
El exconcejal alegó la venta de inmuebles durante los años 1997 y 1998, uno por 14,5 millones de pesetas y otro por 13,3 que se repartió entre los hermanos, sin embargo según los investigadores, Fresco no aportó “prueba documental alguna de estos extremos”.
Como en el caso del resto de imputados por cohecho finalmente se optó retirar este cargo al considerar la fiscal que no se ha podido demostrar de forma clara y fehaciente que los empresarios Ignacio González y Antonio Plasencia pagaron al exconcejal.
