La Asociación de Turismo Rural de Cantabria considera que la normativa del sector es “suficiente”

La Asociación de Turismo Rural de Cantabria ha respondido así, en un comunicado, a la Asociación de Casas en el Entorno Rural (ACERCAN), que este martes ha convocado una nueva concentración para protestar contra la actitud del Gobierno de Cantabria de “seguir ignorando a esta asociación” y pedir la regularización del alquiler vacacional.

En su comunicado ante la “oferta ilegal y sus reivindicaciones”, la Asociación de Turismo Rural de Cantabria ha recordado que tras años de “competencia desleal de cientos de casas particulares” y 187 denuncias presentadas en 2013, en 2014 el Gobierno “toma cartas en el asunto” y abre expedientes sancionadores “a todos aquellos que sin cumplir con las leyes vigentes están ofertando como alojamiento turístico algo que no está registrado como tal y no cumple con las normas obligatorias de seguridad, de registro de viajeros, etcétera, además no de pagar ningún impuesto”.

Una situación que “ha creado malestar entre los sancionados”, que, según la agrupación que preside Jesús Blanco, pretenden que la Dirección General de Turismo anule dichas sanciones, algo que resultaría “prevaricación administrativa”, ha advertido el colectivo, que también ha recordado que los sancionados están llevando a cabo una campaña de protesta pública contra el Gobierno para “buscar el apoyo de los partidos políticos aprovechando que estamos en campaña electoral”.

La Asociación de Turismo Rural ha insistido en que en Cantabria “está prácticamente todo regulado” en materia turística y además recientemente, a partir de 2010, mediante los decretos 82/2010 de 25 de septiembre, que regula apartamentos turísticos estudios, bungalows, chalets; 39/2014 de 31 de julio, de alojamientos turísticos en cabañas pasiegas; 83/2010 de 25 de noviembre que regula el turismo rural, palacios y casonas, posadas y viviendas rurales; 95/2010 de 22 de agosto que regula los campamentos turísticos; 1/2010 de 25 de noviembre que regula los hoteles y las pensiones; a los que se suma el decreto regulador del turismo activo y los albergues.

La asociación también ha recordado que en 2014 los alojamientos rurales de Cantabria han vuelto a ser los más valorados por los visitantes, de acuerdo con el barómetro del buscador Clubrural y la Universidad de Nebrija. Las casas rurales cántabras eran las mejor valoradas con un 4,93 sobre 5, una calificación que roza la satisfacción absoluta y que Cantabria ya había liderado el estudio el año anterior.

“Es una pena que se quiera echar por tierra el trabajo de tantos profesionales del sector, intentando dar cabida bajo el amplio concepto del Turismo Rural a pseudo alojamientos rurales que llevan muchos años haciendo una competencia desleal a los que sí pagan impuestos, sí se preocupan por la calidad y seguridad de sus clientes y, en definitiva, contribuyen a esa posición de excelencia turística”, ha concluido el sector.