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Zarrías niega cualquier irregularidad sobre los ERE en los 12 “consejillos” que presidió

Zarrías entra en el Tribunal Supremo junto a su abogado, Gonzalo Martínez Fresneda

Pedro Águeda

El que fuera hombre fuerte de la Junta de Andalucía Gaspar Zarrías declaró este jueves durante dos horas y media en el Tribunal Supremo. En ese plazo de tiempo, el exconsejero de Presidencia defendió en todo momento la legalidad de las decisiones que tomó, junto a los viceconsejeros de la Junta, en el marco de los denominados consejillos, el órgano inferior a la Junta de Gobierno destinado a elevar propuestas al máximo escalón del Ejecutivo andaluz.

Como hiciera Chaves, Zarrías se detuvo a dar su versión a los medios al término del interrogatorio, pero no aceptó preguntas. En su breve declaración, aseguró: “Creo que ha quedado claro que la Comisión de Viceconsejeros que yo presidía, y que no tenía poder decisorio sino que simplemente elevaba al Consejo de Gobierno cuestiones, siempre, en todo momento y cualquier circunstancia, elevó ninguna que no tuviera todos los requisitos que la ley marca y por tanto todo era perfectamente ajustado a derecho”.

Dentro, Zarrías contestó a las preguntas del juez y el fiscal, que se detuvieron en las doce reuniones del consejillo en que se abordaron las transferencias de financiación objeto de la causa y en las que participó Zarrías, ocho para su discusión y cuatro simplemente para dar el visto bueno a lo abordado en encuentros anteriores. La acusación popular, que encabeza Manos Limpias, aseguró después que Zarrías contestó con evasivas y asegurando que no recordaba. Otras fuentes presentes en la declaración limitan en esos espacios de olvido de Zarrías durante su declaración al detalle de la concesión de las ayudas investigadas.

El informe que la Guardia Civil ha remitido al juez del Tribunal Supremo Alberto Jorge Barreiro presenta a Zarrías y al consejillo, como “cortafuegos” para impedir que la trama de las ayudas presuntamente irregulares salpicara al escalón superior, esto es, los consejeros y el propio presidente de la Junta, Manuel Chaves.

Fuentes de las defensas aseguraron que Zarrías dijo desconocer los informes del interventor de la Junta de Andalucía advirtiendo de las presuntas irregularidades. “Ni los conocía, ni los tenía que conocer”, aseguraron estas fuentes, en referencia a la normativa que solo obliga a informar al consejero del ramo de los informes de actuación. Esos informes del interventor no tenían el carácter de actuación.

Manos Limpias ha pedido la comparecencia del interventor, Manuel Ortega, quien niega que esa normativa impida a los consejeros y a los presidentes de la Junta a conocer sus informes, a pesar de que no fueran de intervención. Ortega está imputado por la jueza Mercedes Alaya.

Zarrías comenzó su intervención ante los medios asegurando que había declarado con “sentimientos encontrados”. “No es agradable tener que declarar ante un tribunal, aunque sea, como he hecho de forma voluntaria, pero también tengo el alivio que supone el haber podido dar explicaciones y responder a todas y cada una de la spreguntas que se me han planteado”.

“Mi obsesión durante mi vida política, ya sea en la Junta de Andalucía o como diputado por Jaén, ha sido estar al lado de la gente, conocer los problemas de la gente y colaborar con ellos . Esa ha sido mi máxima y mi objetivo durante toda mi vida y le puedo asegurar que siempre ha sido”, añadió, antes de abandonar la acera del Tribunal Supremo entre las reclamaciones de los informadores para que contestara alguna de sus preguntas.

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