San Fernando y Villa de Santa Brígida no logran el ascenso a Segunda División B
Canarias sólo ha podido meter un representante en la Segunda División B, Las Palmas Atlético, tras las eliminaciones de la UD San Fernando y de la UD Villa de Santa Brígida, el primero se quedó con la miel en los labios ante el Ecija, mientras que el cuadro satauteño perdía en los dos partidos por la mínima ante los gallegos de Rápido de Bouzas.
De los cuatro equipos que se presentaban en las eliminatorias, sólo el campeón de la liga regular, la Unión Deportiva Las Palmas fue capaz de alcanzar la división de bronce, a una sóla eliminatoria, la de campeones, mientras que los otros tres clasificados, San Fernando, Villa de Santa Brígida e Ibarra, cayeron en las sucesivas fases.
El San Fernando fue capaz de igualar, y superar el resultado de dos a cero que traía de Écija, y cuando todo parecía que sería el conjunto canario el que llegaría a la última eliminatoria, un gol de Suanes, en el minuto ochenta y ocho, ponía el tres a uno en el marcador, y el valor doble de los goles en campo contrario, que dejaba en la cuneta el conjunto de Maspalomas.
Los jugadores de Tino Déniz fueron ajustando el resultado que traían en contra, dos a cero, con goles de Karim y Cesario, empatando la eliminatoria antes del descanso, y dándole la vuelta nada más reanudarse, por medio de Jefté, en un partido impecable de los grancanarios, eliminando la estrategia astigitana, de cerrarse en su campo para defender el resultado de la ida.
La ilusión de pasar, tras el descanso, movió los hilos en los locales que marcaron el tercero, que les daba el billete para la fase final, y hasta un cuarto tanto, anulado por el colegiado, hasta que en los últimos minutos, y de la manera más dura, el Écija Balompié, por medio del recién integrado en el terreno de juego, Suanes, remató a puerta, superando el balón al meta Santi Hidalgo, y dejando una enorme tristeza entre los de San Bartolomé de Tirajana.
Acabó también el trayecto por el ascenso para el Villa al perder por la mínima frente al Rápido de Bouzas, y quedar apeado en la segunda fase, ya traía una renta negativa de Gran Canaria, que no pudo igualar hasta los finales del encuentro, cuando el conjunto vigués, logró un tanto que decidió la eliminatoria.
El Estadio Baltasar Pujalde fue testigo del pase a la fase final del conjunto local, pero lo hicieron ante los más de mil aficionados que acudieron al municipal con incertidumbre, pues el cero a cero que campeaba en el marcador, podía decantar la balanza hacia cualquier lado, que finalmente lo decide, con una vaselina, en el minuto ochenta y siete, Nico.
Salió el conjunto de Israel Quintana deseoso de igualar la eliminatorio, de anotar el tanto que recibía la semana anterior en Los Olivos, pero el conjunto de Patxi Salinas afianzó su zona defensiva, con solvencia, sin encajar un solo gol en los cuatro partidos disputados en las eliminatorias, pese al dominio ejercido por los satauteños.