Los falsos guachinches tendrán que renunciar a esa denominación o serán castigados con fuertes sanciones
La Comisión de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Parlamento de Canarias aprobó este viernes por unanimidad el dictamen sobre el proyecto de Ley de Calidad Agroalimentaria con la artesanía de los productos y la denominación del país, referida a las elaboraciones de las islas, como asuntos clave.
En esa misma futura ley territorial, además está previsto que se dé un plazo de un año a los actuales falsos guachinches que existen en Canarias para que abandonen esa denominación, que se considerará ilegal para los establecimientos que no cumplan con la definición y las funciones propias de los puntos de venta de vino local tan característicos en el medio rural de las medianías (como se recoge en el Decreto 83/2013, de 1 de agosto), de manera especial en la isla de Tenerife.
Tras la entrada en vigor de esa ley, los falsos guachinches tendrán que eliminar esa denominación o si no se verán sometidos a las sanciones que se establezcan en el nuevo marco jurídico.
La persecución de los establecimientos que hoy en día se aprovechan del nombre guachinche sin serlo será cada vez más intensa. En la actualidad, sobre todo en la isla de Tenerife, estos son una plaga y cada vez se engaña más con ellos en el medio urbano.
En la sesión mencionada de la Comisión, la del viernes pasado, según informó la agencia Efe, el diputado del grupo Nacionalista Canario David Cabrera dijo que hay que dar prioridad al papel de los consumidores, de los que ha dicho que valoran la personalidad de los productos “de la tierra” frente a la estandarización que, a su juicio, propone la globalización, “especialmente en productos como el vino y el queso”.
El mismo diputado agregó que la redacción del texto legal busca un espacio normativo común entre organismos e instituciones que directa o indirectamente tienen trascendencia en el control de los productos desde el inicio hasta el final de su proceso.
Realidad exclusiva de Canarias
También pidió que se “regulara algo más” los guachinches como una realidad exclusiva canaria y que estos establecimientos “tan ricos y comunes” en la comunidad autónoma “tengan garantías”.
Asimismo, Ventura Rodríguez, del grupo Socialista, ha expresado que la ley supone una “buena oportunidad” para saber “a dónde ir y a qué atenernos” desde la producción hasta el etiquetado de los productos. Sostuvo que mantendrán “viva” una enmienda sobre el sector pesquero porque, a su juicio, las mejoras que propone esta ley, como por ejemplo el régimen sancionador, es “conveniente” hacerlas extensivas al producto pesquero para garantizar el trabajo del sector primario que “necesita reconocimiento y promoción”.
Rodríguez añadió que habrá que trabajar “con debate y cariño” la inclusión de productos agroalimentarios típicos y artesanos de cada isla, como el almogrote o el guarapo gomero para evitar el fraude y la confusión.
La diputada del grupo Popular Cristina Tavío afirmó que la única manera de defender un precio digno y la justicia social, especialmente para agricultores y ganaderos, es defender la unión de los productores en todos los sectores.
Tavío indicó que Canarias no puede competir en cantidad sino que hay que ayudar a esos productores a competir en calidad y para ello es necesario reforzar los instrumentos que prevé la futura Ley de Calidad Agroalimentaria.
Según expuso Cristina Tavío, se ha cumplido con la reivindicación “histórica” de suprimir las tasas de la agricultura ecológica y “facilitarla en vez de dificultarla” porque este tipo de agricultura garantiza un menor uso de productos fitosanitarios, provoca menos contaminación en la tierra y, por tanto, revierte en el consumo de una mejor agua.
Tavío concluyó su intervención tras valorar que se introduzca y defina la etiqueta del país para que no se use ese término cuando no se utilicen materias primas que no son artesanas y de Canarias.
La apuesta por la “soberanía alimentaria”
Por el grupo Podemos, Concepción Monzón ha expuesto que, si se quiere diversificar el sector y tener “soberanía alimentaria”, lo necesario es que los canarios sepan identificar qué productos son del archipiélago y que estos productores “cumplan” con las garantías y además el consumidor sepa “qué es lo que compra”.
“Son pocos lo que incumplen, pero hacen mucho daño y es importante tener las herramientas suficientes para evitarlo”, ha reflexionado Monzón, que ha avanzado que mantendrán cuatro enmiendas “vivas”, especialmente una referida a la artesanía agroalimentaria porque, a su juicio, se le debe dar “una vuelta” a la definición de “artesano” para identificar las formas de elaboración y las materias primas.