Espacio de opinión de Canarias Ahora
Algún día se sabrá
Como indica el adagio, “que cada palo aguante su vela”. Se deberá señalar a algunos de los máximos responsables gubernamentales de la actual crisis económica. Aclarando que son posiblemente una pequeña parte de responsables colocados en la punta del iceberg de la crisis. En el periodo 2000/2006, el Gobernador del Banco de España era don Jaime Caruana, a propuesta del señor Rato (PP) y consensuado con la oposición del PSOE. Del 2006/2012, el Gobernador fue el señor Fernández Ordóñez, a propuesta del señor Pedro Solbes (PSOE) y sin mediar acuerdo con la oposición para su nombramiento. Estos cuatro nombres y apellidos, sin lugar a dudas han tenido una responsabilidad en las miserias de la economía española.
El último gobierno del presidente Aznar y el primer gobierno del presidente Zapatero, unido a los anteriormente citados, en los momentos que debieron tomar decisiones importantes “sobre el sector ladrillo” adoptaron erróneamente no hacer absolutamente nada al respecto o muy poco. ¿Fue un error intencionado, un error calculado, solo un error, un error y algo más?, algún día se sabrá. Visto así, se podría pensar por algunos que hay personas pringadas en el famoso negocio inmobiliario y por otros se defenderá que fue la ambición de empresarios de la construcción que eludieron todo tipo de control, unido también, a la ambición de la banca y cajas de ahorros, los verdaderos responsables de nuestras miserias económicas. Algún día se sabrá.
Hay decisiones adoptadas en relación con el ladrillo y datos sobre el sector financiero que pueden poner en duda actuaciones que se realizaron en el sector de la construcción, caso de la aprobación de la Ley del suelo del año 1998 que provocó un crecimiento desmedido e importante del sector inmobiliario. Un dato interesante sobre el sector financiero fue el nombramiento del señor Caruana como presidente del Comité de Basilea en el 2003, supervisor de la banca internacional y nacional, con información privilegiada sobre el sector financiero y bancario. ¿Fue casual que no se adoptaran decisiones correctoras sobre algunos bancos y cajas de ahorro en España? Algún día se sabrá.
El sistema judicial español anda enormemente cojo de asesores económicos conocedores de los intríngulis de la ciencia económica y de sus múltiples disciplinas y técnicas de aplicación para la investigación de casos que se presenten en procesos judiciales al efecto. Esta es una reforma necesaria, así como de dotar de medios humanos y materiales, al Tribunal de Cuentas del Estado. El no adoptar decisiones que mejoren la actual situación de estas instituciones del Estado implica una falta importante de responsabilidad y le pasará a nuestros gobernantes una adecuada factura electoral.
El gobierno actual no debería tensar más la cuerda con recortes sociales. Si le faltan ingresos para atender los gastos del Estado, para soportar la financiación de la deuda privada, debería buscar esos ingresos con otros mecanismos fiscales, sobre grandes empresas, sociedades casi sin tributación, etcétera, etcétera, y aparcar la devolución de la deuda con una negociación con Europa de pago a largo plazo. Si no se adoptan medidas de crecimiento económico que tiren de la producción, de la exportación, de la demanda de consumo interno y externo, será imposible para muchos sobrevivir en España.
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