Falacias Presupuestarias

La enmienda a la totalidad a los más de cien tomos que recogen los 150.000 millones de euros de gasto público del Gobierno ?y sus correspondientes ingresos- es sobre todo una actitud política, pues muy pocos se han dejado las pestañas en escudriñarlos al completo para enmendarlos. El Grupo Popular, alternativa a los socialistas, sí lo ha hecho: posee un nutrido grupo de expertos y diputados especializados, aunque entre ellos no haya ningún canario adscrito a la Comisión de Presupuestos. Sí que están en esta comisión y se la van a trabajar con denuedo ?doy fe de que las discusiones presupuestarias ocupan todo el día, comenzando a las 9 ó 10 de la mañana y terminando a las tantas de la noche o incluso de madrugada- tres parlamentarios de los otros dos partidos: el incombustible Luis Mardones y los socialistas Juan Bernardo Fuentes (Fuerteventura), y Erasmo Armas (La Gomera). El resto de los diputados insulares ni están ni se les espera.

Quiere esto decir que si no hay ningún parlamentario canario del PP en la discusión presupuestaria, se van a limitar a introducir las “enmiendas de campanario”, como se las conoce en el argot de la casa: propuestas que desde la oposición sólo pretenden que suenen como campanas ?de ahí su nombre- entre los medios de comunicación: el primer millón de euros para una carretera por aquí, la primera piedra para un centro cultural por allá, la ayuda agrícola, la subvención industrial... Todo falso, por supuesto. Son propuestas que se hacen desde la oposición, pues si se alcanzara el Gobierno el ministro de Economía de turno las mandaría directamente al inodoro. Actitud razonable: si tuviera que atender las peticiones de 350 diputados y 259 senadores reclamando dinero para sus circunscripciones el Presupuesto sería como la carta a los reyes magos y la inflación y el déficit público obligarían a darle la razón a Cubillo, convirtiendo los euros en áfricos y pidiendo el ingreso en la Unidad Africana en lugar de la UE. Por fortuna, el ya dilatado periodo de bonanza que está teniendo España se debe a la pericia y ortodoxia de sus ministros de Economía: Fuentes Quintana, Miguel Boyer, Carlos Solchaga, Pedro Solbes, Rodrigo Rato y de nuevo Solbes han propiciado una riqueza española que no tiene parangón en su historia, salvo en los tiempos del austero Carlos V. Pero líbranos señor de aquellos que quieran imitarlo: cuando hemos tenido sueños imperiales al final hemos terminado en bancarrota (su heredero Felipe II, cuando quiso emularlo, tuvo tres).

Así las cosas, lo más sensato y razonable, cuando se discute el Presupuesto del Estado y no se puede esbozar una alternativa, es negociar. Lo ha hecho el PNV, lo ha venido haciendo siempre CiU ?no es casualidad que Cataluña y País Vasco sean las más prósperas- y aunque ahora estemos en periodo electoral ?y ya casi es costumbre que en año de elecciones todos los partidos quieren parecer alternativa al Gobierno- es mejor un mal arreglo que un buen pleito. Pero Paulino Rivero, que al contrario que Adán Martín, su fuerte no está en los números- se ha entregado a la aritmética de Soria y las cuentas de éste son impecables e implacables: Gobierno menos Canarias partido por dos da igual a ZP nacionalsocialista y tiro del GAL porque me toca. ¿Lo entiendes Paulino? Y el presidente lo comprende a las mil maravillas. Más modesto, en cambio, Román Rodríguez, los socialistas Fuentes y Armas e incluso Mardones ?sabio y experimentado erudito en el arte de la negociación- irán a sacar, entre reverencias, loas y si hace falta, genuflexiones, esa primera piedra, ese despreciable millón de euros que construirá la escuela, el camino o incluso ?con permiso de la Cope- el campanario. Y mientras presidente y vicepresidente se cargan de razones y de ira, los Presupuestos del Estado del próximo año caerán en el saco del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y los cabildos grancanario, gomero y conejero, así como entre los ayuntamientos afines. Fue así con UCD, luego con el PSOE, más tarde con el PP y ahora de nuevo con los socialistas. Si Rato, Solbes, Boyer, Fuentes Quintana o Solchaga lo hicieron, no piensen que los burros vuelan. Simplemente se están discutiendo en las Cortes los Presupuestos...

Federico Utrera