Hotel Oasis, la presa de Soria y la dictadura de los arqueólogos

En 2011 solicite declaración de Bien de Interés Cultural de la Presa de Cuevas Blancas, primera gran obra pública -presa- de almacenamiento de agua en la isla y por sus características estructurales e hidráulicas, especialmente por la cimentación que tiene y la belleza de su forma estructural, además de otras cuestiones como las juntas del paramento de aguas arriba, tomas, etc.

El caso es que el informe desfavorable del técnico del Cabildo fue muy rápido y repleto de garambainas y pamplinas de ingeniería, como p.e., que no se podía comprobar la cimentación construida. Y eso que se había presentado un sondeo desde coronación que dejaba muy claro los datos de la fábrica construida y su altura, ademas de perfiles. Ahí esta una prueba de la dictadura de los arqueólogos del Cabildo, en sus informes parciales. Podían haber solicitado informes de ingenieros de presas o de caminos especializados en grandes presas, pero no, el informe de un antropólogo lleno de pamplinas era más que suficiente para el Cabildo.

Luego llegaron los informes desfavorables para las solicitudes de las grandes presas del Caidero de la Niña y la de San Lorenzo. También repletos de tonterías. Y hace más de un año que esperamos el informe, desfavorable, seguro, de la Presa de Soria. Colón no estuvo en la cerrada pero Simón Benítez si estuvo en 1933.

El patrimonio histórico en Gran Canaria esta sometido a lo que digan los antropólogos y arqueólogos del Cabildo. Con el Hotel Oasis acaba de pasar algo parecido. Se han salido con una garambaina con lo de Colón con tal de salir del aprieto, tanto los técnicos como los políticos. La cuestión es muy sencilla, ya tienen otro territorio en su poder.

Estamos ante otro disparate de los técnicos de ese Servicio al que ellos llaman la Unidad. Desencantados con el PP estamos todos en esta isla, pero también hay que dejar claro que detrás están estos técnicos que sólo quieren seguir diciendo que lo más importante en la isla es el patrimonio arqueológico y luego el arquitectónico, las artes y oficios, el patrimonio artístico y en último lugar, el etnográfico. Y al final de todo, el patrimonio hidráulico. Tienen un orden establecido y decisiones como esta del Hotel Oasis confirman aún más que la dictadura de los arqueólogos ya es insostenible. Lo quieren todo, playas, palmerales, barrancos, etc...