Mientras José Miguel Bravo de Laguna sigue viajando en primera clase y multiplica por ene los gastos en publicidad y propaganda del Cabildo de Gran Canaria, otras instituciones hacen sus deberes. Este jueves se hará pública la decisión de la Secretaría de Política Municipal del Partido Socialista Canario-PSOE de instar a todos los alcaldes socialistas de las islas a renunciar voluntariamente a la paga extra de navidad en solidaridad con los funcionarios, sometidos a esa imposición por prescripción mariana. Veremos si cunde el ejemplo y los demás partidos se suman también a la iniciativa, que una cosa es dar la razón al movimiento municipal en su negativa a reducir el número de concejales (representantes del pluralismo de esta sociedad) y otra es no exigirles a los alcaldes y concejales que cobran salarios públicos gestos de solidaridad con la peña.