No dejen de apreciar otro detalle muy significativo de esa eufórica noticia, lanzada a los cuatro vientos por el Cabildo de Gran Canaria el viernes: la corporación se va a endeudar para hacer proyectos de carreteras, obras hidráulicas y el pabellón del Mundobasket 2014. Si se fijan bien, el Gobierno de Mariano Rajoy ha permitido al Cabildo de Bravo de Laguna (por ceñirnos al espíritu de la noticia) que se endeude para sustituirle en obras que en realidad correspondía realizar al Estado. Porque por culpa de los brutales recortes presupuestarios el Gobierno de España ha suspendido su participación en proyectos del convenio de carreteras, del convenio de obras hidráulicas y ha reducido, de momento en cinco millones de euros, la participación que tenía comprometida para el pabellón multiusos de Las Palmas de Gran Canaria. Este Bravo de Laguna es un chollo para Mariano Rajoy, ¿verdad? Por lo tanto, estamos ante cuatro elementos de un mismo titular basados en mentiras oficiales: 1) no es un préstamo, es una autorización de emisión de deuda; 2) no los va a administrar Bravo de Laguna, sino una corporación democrática; 3) las cuentas del Cabildo están saneadas, luego mintió el PP cuando dijo lo contrario, y 4) con este endeudamiento, el Cabildo va a sustituir al Estado en las obligaciones que tenía comprometidas. ¡Viva Bravo de Laguna! ¡Que vivan las cadenas!