La auditoría realizada por el Cabildo a la gestión de Antonio Alarcó al frente de la Fundación Canaria Sanidad y Salud de Tenerife durante su mandato entre 2007 y 2011 contiene otros muchos aspectos que han escandalizado a las personas que la han visto. Todavía no se han desentrañado en todos sus matices, pero a partir de los datos que han trascendido se confirma que el senador Alarcó es un coqueto al que le gusta tener a determinados periodistas muy contentos. Y muy agradecidos. Al caso de Andrés Chaves, que es el único que aparece personalizado con 100.000 euros para él solito, hay que sumar otros 180.000 gastados en algo parecido a la publicidad, una partida para la que no debía haber asignación presupuestaria por tratarse de una fundación que no requería tal inversión. Los auditores han llamado la atención sobre esa partida, y los pocos políticos que han visto la auditoría no han encontrado otra explicación más plausible que el afán de Alarcó por hacerse homenajes en forma de entrevistas en diversos medios informativos que cobraban precisamente por ese concepto: homenaje a Alarcó. Ya les iremos relatando en cuáles son esos medios en cuanto los confirmemos.