No se pierdan la información que firma nuestro compañero Noé Ramón acerca del palacio de congresos Magma, de Adeje, en Tenerife, porque dependiendo todo del cristal con que se mire, refleja a la perfección cómo se hacían las cosas en este mismo Gobierno de Canarias cuando en su Consejo de Gobierno sentaba sus reales el Partido Popular, entre otros José Manuel Soria como vicepresidente, y la insuperable Rita Martín como consejera de Turismo. Ahí tienen, en la noticia, cómo está en el alero la adjudicación de la explotación de ese palacio tan sandunguero, cuya construcción se presupuestó en 8,2 millones y terminó costando casi cinco veces más, 42 millones. Rita era mucha Rita adjudicando a troche y moche desde esa empresa pública de nombre Promotur que tiene blindado el acceso a los expedientes administrativos públicos alegando que se podría vulnerar el derecho a la confidencialidad de las empresas que concursaban y ganaban aquellos concursos imposibles. Es decir, que los periodistas y los ciudadanos nos podríamos enterar, por ejemplo, de quien andaba detrás de las empresas que eran invitadas a concursos restringidos; cuáles aportaban bajas temerarias; cuáles ganaban concursos siendo las más caras, etcétera, etcétera. En el caso de Magma, una agencia de viajes de Lanzarote ?tierra natal de la consejera- y un rent a car se hicieron con la explotación de un palacio de congresos frente a empresas especializadas en la cuestión. Ritismo puro.