La segunda realidad que desmiente a las plañideras tuvo lugar este miércoles en Las Palmas de Gran Canaria, ciudad en la que se reunió el comité de seguimiento de las Zonas Comerciales Abiertas, formado por el Gobierno regional y el Cabildo de Gran Canaria. La primera noticia que arrojó esa reunión fue la sorprendente presencia en la misma del consejero de Comercio de la Corporación insular, Juan Domínguez, que por un momento abandonó su apretada agenda de pases de modelos y cócteles para ponerse a trabajar. Nunca antes se había constituido en una reunión, lo que le sirvió para a) conocer el trabajo que en esa comisión se desarrolla; b) ser testigo de excepción de un acontecimiento que también desmiente a su socio político, el PP, en relación a la pérdida de las subvenciones para la zona comercial abierta de la zona Puerto-Canteras de la capital grancanaria. El alcalde de la ciudad, Juan José Cardona, habría proclamado urbi et orbi que el Gobierno se había llevado esa subvención para Tenerife, cuando lo que realmente estaba ocurriendo era que el Ayuntamiento no terminaba de cumplir con su obligación de cumplimentar el plan de peatonalización de la zona porque no se atreve a tocar la calle Luis Morote. Desbloqueadas las reticencias, este miércoles quedó aprobado el plan y con él ridiculizados los lamentos cardonianos: los 600.000 euros siguen donde siempre estuvieron.