Ya es oficial porque ya está en el Boletín Oficial de Canarias. Desde este martes han quedado adjudicadas 155 nuevas frecuencias de radio en las Islas Canarias tras el accidentado concurso que convocó en 2010 el Gobierno de Canarias cuando aún formaban parte de él Coalición Canaria y el PP, es decir, Paulino Rivero y José Manuel Soria, ministro ahora, miren ustedes qué vueltas da el destino, responsable de las telecomunicaciones y, por tanto, de la ordenación del espacio radioeléctrico. Las nuevas frecuencias habrán de ser ocupadas por los adjudicatarios en los plazos que cada uno haya establecido en su respectiva oferta, pero nunca más tarde de los 18 meses, plazo a partir del cual el Gobierno de Canarias promete ponerse muy exigente. No solamente con los que decidan permanecer ocupando frecuencias de modo alegal, sino también vigilando que los nuevos titulares cumplan con las ofertas que presentaron y que les llevaron a obtener las concesiones. Hemos mirado por encima algunas de esas ofertas y se nos hace muy cuesta arriba creer que algunos vayan a poder cumplir con sus compromisos. Por ejemplo, y vaya como aperitivo: parece una quimera que Kiss FM, que es una cadena musical, una radiofórmula, vaya a crear en Canarias los 308 puestos de trabajo que ha prometido para hacerse acreedor nada menos que de 28 frecuencias. Como resulta una extravagancia que en los quince años de concesión vaya a invertir en las islas la friolera de 11,8 millones de euros. Un negocio imposible.