Continúa arrojando interesante novedades el recientemente cerrado concurso de asignación de frecuencias de radio en Canarias. Y decimos definitivamente cerrado a falta, eso sí, de que se sustancien los recursos contenciosos-administrativos que han anunciado y/o interpuesto algunas de las empresas que concursaron y no alcanzaron sus objetivos o que no pudieron concursar por haber llegado tarde al cierre del plazo de presentación de ofertas. En este último epígrafe deben encuadrarse los destinatarios de un “coloquio-informativo” que va a impartir próximamente el bufete de abogados especializado en la materia Díez & Romeo, responsable de que unas cuarenta empresas ?noventa ofertas- perdieran toda opción por haber llegado tarde a entregar su documentación. Muchas de ellas pequeñas empresas que, por la decisión del bufete de recurrir el concurso en su nombre, no han podido retirar sus avales y, al menos, no arruinarse del todo. De ahí seguramente que el coloquio proponga, entre otros asuntos, abordar “el escenario dual donde cohabitarán distintas clases de emisiones radiofónicas”. Porque, efectivamente, entre los que recurrieron sin querer recurrir y los clientes de Díez & Romeo que sí obtuvieron licencia de un concurso recurrido por sus propios abogados, la cosa es mucho más que dual. Ah, y don Josesteban acudiendo a la Fiscalía Anticorrupción, que ésa es otra.