No todos los viajes de autoridades españolas a Latinoamérica se han realizado por ese convencional método del vuelo regular. Por ejemplo, ¿se ha transparentado del modo adecuado cómo fue el viaje a Argentina del ministro de Industria, Energía y Turismo el pasado mes de febrero? No, desde el Ministerio ocultaron en todo momento los preparativos del viaje y solo cuando ya José Manuel Soria estaba de regreso se explicó que fue una visita “relámpago” que obtuvo como resultado un encuentro infructuoso con el viceministro e Economía, el todopoderoso y muy energético Axel Kicillof. Días después de ese viaje relámpago, “casi clandestino”, en expresión de varios medios de comunicación españoles y argentinos, se supo que el medio de transporte utilizado por José Manuel Soria no fue un vuelo regular o un avión adscrito a la Fuerza Aérea Española, que dispone de varios para cualquier tipo de desplazamiento, bien sea urgente, bien sea relámpago o bien sea incluso semiclandestino.