La calima, en datos: radiografía de cómo Canarias volvió a ser una de las regiones con peor calidad del aire del mundo

Tarde de intensa calima, viento y oleaje en San Cristóbal, Las Palmas de Gran Canaria

Toni Ferrera

Las Palmas de Gran Canaria —
28 de diciembre de 2022 21:54 h

0

El último episodio de intrusión de polvo sahariano en Canarias ha vuelto a situar al Archipiélago entre las regiones con peor calidad del aire del mundo. Algunas estaciones de medición de las Islas, como las ubicadas en Agüimes, Playa del Inglés, Las Palmas de Gran Canaria o Telde, todas ellas en Gran Canaria, registraron este martes máximas concentraciones de partículas menores de diez micras (una micra corresponde a la milésima parte de un milímetro), las mundialmente conocidas como PM10, y se colaron en el ranking que elabora al respecto la organización Proyecto de Calidad del Aire del Mundo.

La calima ha impactado a toda Canarias y seguirá haciéndolo hasta final de año, pero la isla más afectada de todas está siendo Gran Canaria. La estación medidora del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC), en Agüimes, llegó a contabilizar este martes una concentración de 928 microgramos por metro cúbico (µg/m³) en una sola hora, algo que solo superó en todo el día la ciudad de Karol Bagh (999), en la India. El valor máximo en Las Palmas de Gran Canaria alcanzó las 793 PM10, el cuarto más alto del mundo, mientras que las cifras registradas en Playa del Inglés (632) y Telde (546) dejan a estos dos emplazamientos en los puestos sexto y octavo de la clasificación mundial, respectivamente.

Los datos hacen referencia a la concentración máxima de PM10 en un momento determinado de la jornada. En este caso, no existen referencias de cuán malo es registrar valores tan altos a las 15:00 de la tarde, por ejemplo, como ocurrió en algunas localidades grancanarias. Pero con los promedios diarios sí que hay umbrales y límites para determinar la calidad del aire definidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que hace un año endureció los indicadores de peligro para meter presión a los países en la lucha contra la polución.

Volviendo a la red de medición del ITC, esta anotó el martes una media diaria de 225 PM10, mientras que el límite de seguridad que fijó la OMS está en 45. Es una acumulación cinco veces mayor a la recomendada por el organismo internacional. La Red de Control y Vigilancia de la Calidad del Aire de Canarias puntualiza que por encima de 151 PM10 de promedio el aire se vuelve “extremadamente desfavorable” y se dan “condiciones de emergencia para la salud pública”, pues “la población entera puede verse gravemente afectada”.

Lo que ocurrió en la citada estación de Agüimes es inédito. En los pocos meses que publica cifras recogidas por el Proyecto de Calidad del Aire del Mundo, no había llegado a un registro tan elevado. Sin embargo, que una red como tal de las Islas alcance esos valores es bastante frecuente. Muchas lo hacen cuando el cielo del Archipiélago se vuelve sepia por culpa del polvo desértico proveniente del Sáhara, sobre todo en los primeros y últimos meses del año.

Un lugar estratégico para su medición es la estación de El Río, en Santa Cruz de Tenerife. Estudios específicos sobre la calima en las Islas consideran esta ubicación ideal para las tareas de identificación de intrusiones de polvo africano por “su situación y bajos niveles de fondo”, lo que indica que la contribución de los seres humanos a las concentraciones medidas es “baja” y, por tanto, todos los picos registrados se deben a este fenómeno.

Este año, en la estación de El Río se ha superado el umbral diario de PM10 fijado por la OMS hasta en 45 ocasiones, el dato más alto de los últimos ocho cursos, según un análisis elaborado por Canarias Ahora. El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfica determina en 35 días al año el número máximo de veces que se debería superar el límite diario marcado por la Organización Mundial de la Salud. Los resultados demuestran, en resumidas cuentas, que 2022 está siendo un curso especialmente duro con respecto a la calima.

La buena noticia es que ninguno de estos excesos reportados en las Islas acarrea sanciones por la contaminación. El Estado ofrece en sus informes anuales una “visión global” de la calidad del aire en España teniendo principalmente en cuenta las fuentes antropogénicas del mismo, dejando fuera otros factores naturales como la llegada de polvo desértico o el propio clima en un contexto de cambio climático. La cruz para el Archipiélago es que las partículas PM10 y PM2,5, tengan el origen que tengan, afectan a la salud de los ciudadanos.

Una investigación publicada en 2011 relaciona las masas de aire africano en Barcelona con el aumento de los casos de enfermedad meningocócica, esto es, la meningitis causada por las bacterias Neisseria meningitidis, cuatro semanas después. Otro trabajo realizado en la capital catalana concluyó que “la exposición a corto plazo de partícula PM durante los días de polvo sahariano está asociada con la mortalidad, tanto cardiovascular como respiratoria”.

En Madrid, un estudio demostró que la mortalidad relacionada con las concentraciones de PM2,5, cuyo origen principal es el tráfico rodado, suele darse en los días sin intrusiones de polvo del Sáhara, mientras que en las jornadas con calima pasa todo lo contrario con las PM10. Y en Canarias, otro trabajo científico llevado a cabo a principios de siglo reveló que la presencia de este material en suspensión provoca un aumento de la demanda asistencial urgente por patología respiratoria, trastornos de ansiedad y dolores torácicos atípicos.

El sistema de avisos por polvo en suspensión está regulado en el Plan Nacional de Protección y Vigilancia de Fenómenos Meteorológicos Adversos. No obstante, el umbral máximo de alerta es el “amarillo”, nada en comparación con lluvias torrenciales o fuertes rachas de viento, que pueden llegar a los niveles de “naranja” y “rojo”. Expertos en gestión de riesgos han pedido recientemente modificar esta norma para prevenir mejor episodios intensos de calima como el acontecido este martes en Canarias o el que tuvo lugar entre los días 14 y 16 de marzo de este año en la Península. 

Etiquetas
stats