Lassalle: “Tenemos instituciones culturales que han costado una barbaridad y están vacías”
MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
El Secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle, ha denunciado este jueves durante su comparecencia en la Comisión de Cultura del Senado los defectos de la política cultural española hasta llegar a un actual “entramado cultural ineficientemente planificado”.
“Tenemos instituciones culturales que han costado una barbaridad y están vacías a pesar del gasto y el esfuerzo presupuestario”, ha señalado el Secretario de Estado de Cultura, para quien la gestión cultural de nuestro país ha sido “deudora de clientelismos basados en subvenciones nominativas otorgadas sin control ni transparencia”.
En este sentido, ha subrayado que estas subvenciones han sido denunciadas ante el Tribunal de Cuentas y al día de hoy, son “desconocidas por muchos medios de comunicación”.
“Este ha sido el modelo cultural que ha tenido este país y la crisis lo ha puesto en evidencia”, ha declarado Lassalle, añadiendo que la crisis también ha puesto en evidencia los aspectos positivos como archivos, bibliotecas y teatros públicos que se han creado.
Asimismo, ha alegado que el modelo cultural ha girado en torno a una financiación pública que era el único soporte de su diseño, creado proyectos y contenidos sin contrastar su viabilidad.
“SOBREFINANCIACIÓN PÚBLICA”
“Esa cultura de sobrefinanciación publica no podía continuar en un escenario de crisis y no podíamos permitirnos viendo los prepuestos no plantearnos una ley de mecenazgo que nos homologara al resto de Europa”, ha alegado el responsable de Cultura.
En esta misma línea ha declarado que este modelo no era eficiente ni sostenible e incluso ha denunciado que muchas acciones culturales eran “conducidas por tutelas inaceptables de patrocinio político”.
“No voy a citar subvenciones que serían rocambolescas de escribir, ni nombres ni apellidos que están en esas subvenciones y situaciones absolutamente absurdas que nos han llevado a una inflación de gasto que consistía que en una pura transferencia de recursos públicos al ámbito de la cultura, muchas veces indebidamente gestionada, y no ha pasado nada, pero ahora sí”, ha concluido Lassalle.
