Al Shabaab refuerza sus posiciones en Kismayo ante el inminente ataque de la Unión Africana
MOGADISCIO, 19 (Reuters/EP)
Cientos de milicianos de Al Shabaab, un grupo islamista afín a Al Qaeda, han entrado este miércoles en la ciudad portuaria de Kismayo, en el sur de Somalia, un día después de que residentes de esta zona confirmasen la retirada de comandantes insurgentes.
Los refuerzos llegaron a bordo de camiones dotados de armamento y, según testigos, procedieron a instalar barricadas defensivas con las que frenar posibles avances de las fuerzas de la Unión Africana. Algunos rumores que circulan por la ciudad sitúan en ella a uno de los tres principales mandos de Al Shabaab.
El carnicero Farah Roble ha explicado que “los combatientes de Al Shabaab han recuperado las bases y campamentos que habían abandonado en los últimos días”. “Estamos aterrados. Al Shabaab parece decidida a combatir por Kismayo”, ha advertido.
El portavoz militar keniano Cyrus Oguna ha subrayado que el combate por el control de Kismayo es ya inevitable, toda vez que las tropas extranjeras se encuentran “muy, muy cerca”. Sin embargo, ha llamado a ser “cautos” porque las condiciones del terreno hacen que sea relativamente fácil la comisión de ataques.
“Sin embargo, ocurrirá. Kismayo caerá”, ha apostillado Oguna en declaraciones telefónicas a Reuters.
La derrota de Kismayo, un bastión clave para la rebelión que inició Al Shabaab hace cinco años, supondría un importante avance sobre la milicia, tanto en términos morales como militares. Los analistas, no obstante, no creen que la pérdida de Kismayo suponga la derrota definitiva de Al Shabaab, que podría reconvertir su lucha a un estilo más de guerrillero con atentados en zonas urbanas.
Un portavoz de Al Shabaab, Abdiasis Abu Musab, ha descrito una situación de normalidad en Kismayo, donde “todas las oficinas y negocios están abiertos”. “No tememos a nuestros enemigos. No pueden simplemente lanzarse sobre Kismayo porque tenemos fuertes defensas”, ha relatado.
LOS CIVILES HUYEN
La ONU calcula que unos 4.000 civiles han huido de la ciudad somalí desde el lunes y residentes como Ismail Sugow han denunciado que Al Shabaab está tratando de reclutar nuevos efectivos, en base a un supuesto “deber” musulmán que les obliga a combatir contra las tropas de la Unión Africana.
“Al Shabaab dijo en las mezquitas que todos los musulmanes deberían unirse a la yihad porque las tropas kenianas violarán a sus mujeres y hermanas y saquearán sus casas”, ha señalado, por su parte, Hussein Nur, también habitante de Kismayo.