“La fábrica’ defendía la proyección de la gran cultura con escasos medios”
Una exposición en el Espacio Cultural de CajaCanarias de Santa Cruz de La Palma rinde homenaje a la revista La fábrica, una publicación editada en la Isla que fue referencia cultural en el Archipiélago. “Surgió con un carácter subversivo porque planteaba la defensa y la proyección de la gran cultura con escasos medios, demostrando que la creatividad y el hecho cultural en sí del arte, de la literatura, siempre que haya buenas intenciones y un buen proyecto detrás, se puede ofrecer al público con las máximas garantías y pocos recursos económicos”, ha asegurado a La Palma Ahora el escritor y profesor Anelio Rodríguez Concepción, que dirigió la revista durante su diez años de existencia, de 1995 a 2005.
Desde el punto de vista formal, subraya Anelio, “La fábrica era humilde pero muy ambiciosa en cuanto a contenidos, siempre se intentó tirar muy alto, hasta el punto de que contamos con colaboraciones de auténticas personalidades, colaboradores de muchos quilates como Moebius, Griffo, Víctor Erice, Saramago, Wole Soyinka (Nobel de Literatura en 1996), Paul Auster, Manolo Blahnik o Martín Chirino”. A la prestigiosa publicación palmera le concedieron entrevistas personajes de la talla de Daniel Barenboim, Juan José Millás, Jorge Amado o Torrente Ballester.
Anelio recuerda que La fábrica nació “a mitad de los 90, una época donde la política del pelotazo estaba metida muy de lleno en el mundo de la cultura, incluso con la cultura se cometieron, a mi juicio, enormes barbaridades, con gastos excesivos de dinero”. “Fue una revista que desde el principio salió a la luz bajo el signo de la amistad y la complicidad, de muchas y muy variadas personalidades del arte y la literatura, que supieron entender que La fábrica era un proyecto noble y ambicioso, a pesar de la precariedad de medios”, dice.
Entre los colaboradores canarios de La fábrica se encuentran Cecilia Domínguez, Carlos Pinto Grote, Arturo Maccanti o Andrés Sánchez Robayna. También participaron en este relevante proyecto cultural los palmeros Luis Cobiella, Ricardo Hernández Bravo, Nicolás Melini, Elsa López, Lucía Rosa González, Paco Guimerá, Francisco Concepción, Poldo Cebrián, Pedro Riverol o Pablo Espantaleón.
La publicación “siempre contó con el apoyo de todo tipo de instituciones, desde el Cabildo hasta CajaCanarias, pasando por el Gobierno de Canarias o el Colegio de Arquitectos”.
La muestra, que fue inaugurada este jueves bajo el título La fábrica, punto de encuentro (1995-2005), podrá visitarse hasta el próximo 30 de diciembre. A lo largo del recorrido expositivo se exhiben, por un lado, obras y textos de diferentes artistas de talla universal cedidos en su momento a La fábrica; entre ellos, cuadros y dibujos de Eduardo Chillida, Gonzalo González, Pedro González, Martín Chirino, Cristino de Vera o Manolo Blahnik, así como una importante selección de la Colección de Arte CajaCanarias. Otro ámbito de la exposición se encarga de rescatar el legado documental de La fábrica, con buena parte de la correspondencia intercambiada con José Saramago, Andrés Sánchez Robayna, Sabas Martín, Luis Mateo Díez, Cecilia Domínguez, Pepe Hierro, Manuel Padorno, José Ángel Valente o Arangueren.
