Unos 40 biólogos abordarán la situación de las dos especies más amenazadas de la Isla
El Área de Medio Ambiente del Cabildo de La Palma celebrará entre el martes 28 y el jueves 30 de abril unas jornadas técnicas a la conservación del lotus en Canarias, así como a la conservación de las especies de esta planta más amenazadas en La Palma el Pico de Fuego (Lotus Pyranthus) y el Pico Cernícalo (Lotus Eremiticus), y al trabajo de recuperación de las mismas que se está realizando, señala en un comunicado. El encuentro tendrá lugar en el Hotel H10 Taburiente Playa, en Los Cancajos, Breña Baja.
La actividad principal de esta cita será la celebración del ‘I Workshop para la Conservación del género Lotus en Canarias’. Además, se celebrará el ‘II Workshop para la Conservación del Pico de Fuego y el Pico Cernícalo en La Palma’ y la ‘III Reunión Técnica de Seguimiento del Plan de Recuperación’ de las mencionadas especies en la Isla.
“Desde la Consejería de Medio Ambiente hemos conseguido reactivar el compromiso del Cabildo para con la recuperación de dos de las especies más amenazadas en la Isla. Este encuentro con profesionales marcará las pautas a seguir a partir de ahora para poder seguir impulsando el trabajo de recuperación y puesta en valor de estas especies endémicas únicas en el mundo”, asegura la consejera de Medio Ambiente Nieves Rosa Arroyo.
Unos 40 biólogos y botánicos de Canarias, del resto de España y de otros países tomarán parte en este encuentro, en el que las jornadas del martes y el jueves se dedicarán de forma intensiva, en horario de mañana y tarde, a los workshops, con ponencias de expertos, mientras que en la jornada del miércoles los participantes podrán realizar una visita a las poblaciones naturales de lotus que existen en La Palma y también podrán conocer los trabajos de recuperación realizados en la Isla.
El Servicio de Medio Ambiente del Cabildo de La Palma “lleva realizando trabajos de recuperación del Pico de Fuego y del Pico de Cernícalo desde el año 2008”, se indica en la nota. En este sentido, “se han creado varios vallados para la protección de algunas de sus poblaciones, con la intención de protegerlos de los herbívoros (especialmente de los arruís)”.