El enjambre sísmico de La Palma tiende a disminuir

El enjambre sísmico que se inició en La Palma el pasado viernes, 24 de julio, tiende a disminuir. El Instituto Geográfico Nacional (IGN), en la jornada de este domingo, entre las 01.59 y las 05.35 horas (hora local), de momento, solo ha registrado dos nuevos temblores, uno en Fuencaliente (a las 01.59), de magnitud 1.8 en la escala de Richter, a una profundidad de 26 kilómetros , y otro en El Paso (a las 05.35), de 1.2, también a una profundidad de 26 km.  El sábado, a lo largo de la jornada, el IGN detectó tres (dos en Mazo y uno en Fuencaliente).

La directora del Observatorio Geofísico del IGN, Carmen López, indicó este sábado a La Palma Ahora que “el enjambre parece que disminuye”, sobre todo en las últimas 48 horas, “aunque es pronto para decir si esta tendencia se mantendrá”. Las localizaciones, añadió, “siguen por el mismo área con similar dispersión y sobre los 25 a 30 kilómetros de profundidad”.

La Palma ha registrado, desde el pasado viernes, 24 de julio, hasta las 05.35 horas de este domingo, 2 de agosto, 124 microsismos. Todos los terremotos de baja intensidad del nuevo enjambre sísmico han tenido lugar en la mitad sur de La Palma. La inmensa mayoría han sido localizados en los municipios de Fuencaliente y Mazo. También se han registrado, aunque en menor medida, en Tazacorte, Breña Alta y Breña Baja. La magnitud oscila entre 1.0 y 2.4.

En febrero de 2018, informan desde el IGN, se produjo una serie sísmica en la misma zona que la actual, que estuvo formada por 85 terremotos de magnitudes entre 1.8-2.6 y profundidades entre 25-30 km, con una distribución epicentral en dirección este-oeste. La duración de esta serie sísmica fue de 5 días.

La actual red sísmica del IGN en La Palma está formada por un total de 13 estaciones, “que permiten realizar un seguimiento en tiempo real de la actividad microsísmica de la Isla”. La Palma es una isla volcánica activa, por lo que “la ocurrencia de estas series sísmicas, que se encuentra dentro de la normalidad, es objeto de nuestras labores permanentes de vigilancia volcánica, apuntan desde el IGN.