Instaladas las barreras dinámicas para prevenir los desprendimientos del Risco de La Concepción
El Cabildo de La Palma, a través de la Consejería de Infraestructuras, avanza en los trabajos de emergencia para prevenir desprendimientos del Risco de La Concepción a la carretera de Bajamar. En concreto, se están instalando barreras dinámicas que asegurarán la zona durante las obras de saneado del talud.
Las obras de emergencia de saneo, estabilización y protección de taludes con las que se pretende evitar la caída de rocas a la carretera desde el Risco de la Concepción, en la zona próxima al muelle pesquero de la carretera de Bajamar donde confluyen los términos municipales de Breña Alta y Santa Cruz de La Palma, comenzaron el pasado 10 de enero.
El consejero del área, Jorge González, explicó en nota de prensa, que los trabajos, valorados inicialmente en un millón de euros, tienen como objetivo principal ofrecer seguridad tanto a quienes circulan con sus vehículos como quienes transitan a pie por esta zona.
En los últimos meses del año pasado, y debido en parte a las inclemencias meteorológicas, se registraron desprendimientos que afectaron a coches estacionados y que obligaron al balizamiento de este área, así como a la tramitación de la declaración de emergencia de los trabajos por parte de la institución insular.
En una primera fase, se instalará una doble barrera de pantallas de protección dinámicas de hasta 7 metros de altura con el fin de evitar que un posible desprendimiento afecte a la zona del muelle pesquero. Finalmente, las barreras dinámicas quedarán instaladas en la zona ajardinada más próxima al risco.
La segunda fase consistirá en el saneo del talud del risco propiamente dicho. Los trabajadores de una empresa especializada contratada para este fin realizarán trabajos verticales en altura, durante el cual el tráfico rodado y el tránsito peatonal serán desviados para prevenir posibles accidentes provocados por desprendimientos.
Por último, se acometerán trabajos para la instalación de “una malla y red de anillos anclada con bulones en la corona de la pared vertical del risco, en un tramo de 130 metros lineales desde los que se cayeron las piedras en los últimos desprendimientos”, se explica en la nota. Estos trabajos requerirán de una intervención especial, puesto que se desarrollarán a unos 120 metros de altura.
